Otros 800 millones en ayudas y participaciones en compañías energéticas
La política industrial del Gobierno vasco, además de los 400 millones para compra de acciones en empresas, contempla en este año el desembolso de otros ... 822 millones. Una cantidad que se divide en ayudas y subvenciones, muchas de ellas transferidas desde el Gobierno de España gracias a los fondos europeos, pero también en la participación de empresas con otros socios privados en el ámbito energético.
Un total de 52 millones se destinan en las Cuentas del Ejecutivo este año para desarrollar con compañías como Petronor, Iberdrola, Solaria, Enagás o CIE Automotive diferentes sociedades en las que el Gobierno es socio accionista. Se trata de Aixeindar, que con Iberdrola desarrolla cuatro parques eólicos en Euskadi, Indarberri, para construir centrales fotovoltaicas con Solaria, así como la planta de combustible sintético que impulsa Petronor o la fábrica de baterías de Basquevolt en la que participan también Enagás, Iberdrola o CIE Automotive. Son proyectos que trascienden la política de ayudas y en los que el Ejecutivo participa a través de su sociedad púbica del Ente Vasco de la Energía (EVE) con inversiones anuales como socio.
La sociedad energética del Gabinete Urkullu busca generar ingresos con sus participaciones empresariales -como el 50% que tiene en la regasificadora gestionada por Enagás en el Puerto de Bilbao- para impulsar estas actividades que favorezcan la transición energética.
Subvenciones
Desde el EVE también se han convocado líneas de subvención por más de 100 millones para que las empresas puedan acometer inversiones que les permitan avanzar en la eficiencia energética. Muchas de ellas vienen financiadas desde Bruselas con el dinero de los fondos de recuperación y, otras, con recursos de la Administración General del Estado.
El grueso de este capítulo es el que gestiona la Agencia para la Promoción Industrial (SPRI). Con una convocatoria anual de ayudas que supera los 600 millones. Se trata de líneas que afectan a casi todos los sectores y actividades de la empresa. Por un lado buscan apoyar inversiones para el crecimiento de las compañías y su producción, pero también el avance de la digitalización o la internacionalización. La formación, a través de becas y el desarrollo de polígonos para el asentamiento de actividades son otras de las líneas de actuación.
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