Choque del Bilbao Athletic en la frontera para catapultarse

La victoria ante el Calahorra insufló cierta energía al Bilbao Athletic, ubicado a rebufo de la zona noble y esperando cerrar el año en el Stadium Gal cosechando tres puntos ante el Real Unión (16:30 h.). Delante, un equipo contrastado que atraviesa un bache transitorio, pero con mucho predicamento en su plantilla.

El técnico del Bilbao Athletic, Aritz Solabarrieta, que debutó con derrota en Mareo y rescató los tres puntos ante los de Miguel Sola, va recuperando efectivos. No serán de la partida Sancet, Baqué y Seguín, pero sí el resto, incluídos los últimos lesionados ya sanados Gorka Pérez, Iñigo Muñoz y Asier Benito.

El Real Unión viene trastabillado ante el CD Vitoria en Ellakuri, en el que el técnico fronterizo Juan Domínguez alineó de salida a uno de los hermanos Eizmendi, el excachorro Alain, que lleva 4 goles este curso y coincide de nuevo en la plantilla con Eneko, al exportero del Barakaldo Irazusta, al ex de la Real Estrada o los delanteros Jorge Galán y Mikel Orbegozo, que suma 9 goles, dos menos que Asier Villalibre. Una plantilla de empaque, con amplia expeciencia y tablas en la categoría más algún joven promesa como el delantero navarro Gabriel Lizarraga, de 19 años, que lo va a fichar la Real y ceder en Irún hasta final de temporada.

Aúnque el Real Unión, en cuyo seno siguen lesionados Yoel Sola, Cristian Sanz y Mario Capelete, ocupa un incómodo puesto 14, con 18 puntos, cuatro solo por encima del playoff de descenso y siete menos que los rojiblancos, Aritz Solabarrieta no se fía ni mucho menos del equipo irundarra: «Es verdad que igual otros años han estado más arriba, pero han tenido problemas de dinero, el club se va cambiando, la Real también se metió. Es un equipo compuesto de buenos jugadores, con la idea de tener el balón y creo que este año también lo está siendo», recopilaba el técnico de Ondarroa, que encara su tercer partido en un mes muy intento y pleno de adaptación en su caso.