Agirrezabala puja fuerte en la portería del Bilbao Athletic

En Lezama se confía mucho en Julen Agirrezabala, portero titular el curso pasado en el Basconia y que se abre paso en el filial. Parece destinado a promocionar al primer equipo a medio plazo. En la matinal de este sábado en La Florida lo corroboró con una actuación colosal, que impidió al Portu sumar algún punto ante el Bilbao Athletic. Imposibilitó un penalti a Adrián Güemes, al que impidió que triunfara con un hat-trick en una espléndida estirada, estuvo valiente en las salidas de puños, mandó a la zaga con personalidad e intervino en otras dos paradas de mérito, sobre todo en un uno contra uno ante Nacho Ruiz, que salvó con suficiencia y templanza. Todo ello con solo 19 años y debutando en la exigente Segunda B.

Julen Agirrezabala fue determinante en Portugalete supliendo bajo palos a Ander Iru, que se mantiene en su domicilio por precaución debido a la dichosa pandemia que ha afectado a su padre, Aitor Iru, preparador de porteros del primer equipo del Athletic: «Las dos primeras jornadas Iru estuvo a gran nivel. Los dos lo tienen. Van a mejorar con esa competencia, que les va a venir muy bien. La portería la tenemos muy bien cubierta y estamos contentos. Julen, al margen de parar el penalti, que es lo más llamativo, ha estado sobrio, con presencia para un chico tan joven y cuando las ha tenido de parar, las ha parado», resumía el míster rojiblanco sobre la actuación en el tapiz jarrillero del arquero de Rentería tras la victoria por 2-3. Lo cierto es que Ander Iru (22-8-98) fue determinante también para capturar un punto en Gobela ante el Arenas, con tres intervenciones en los últimos compases, y frente al Racing salvó un mano a mano con Balboa.

El apellido Agirrezabala está subrayado en rojo siguiendo la estela de los Kepa Arrizabalaga, Remiro o Unai Simón. El joven Julen, de Rentería (26-12-2000), es considerado por el organigrama técnico de Lezama como un portero muy sobrio, rápido de movimientos, notable bajo palos y en el juego aéreo, con 1'87 de estatura, y dotado de un notable toque con el pie izquierdo. Se pide, sin embargo, paciencia por su bisoñez. Fue fichado desde el Juvenil del Antiguoko donostiarra en marzo de hace dos campañas, entonces fuera de su área de clubes convenidos, junto al centrocampista Jon Guruzeta, hermano de Gorka Guruzeta, con el que ya comparte plantilla en el filial de Etxeberria. Agirrezabala fue un asiduo de la selección de Euskadi Cadete y Juvenil y varios clubes profesionales le sondearon en su etapa del Antiguoko.

El Athletic estuvo hábil para atarle con un contrato por cuatro años y asimilarle para su estructura. Antes de recalar en el Juvenil de Honor rojiblanco acumulaba tres campañas entrenándose con regularidad en Zubieta y participando en distintos torneos con la Real Sociedad, que le había presentado, además, una oferta para recalar en su Juvenil de Honor. Agirrezabala apostó fuerte y se decantó por la propuesta superior del Athletic y ahora ya se encuentra en el penúltimo escalón, tras descollar en el Basconia con 19 partidos el curso pasado, y la disputa del playoff express de ascenso en Sarriena. El domingo dejó pinceladas de su potencial en el Bilbao Athletic, las que presagia un recorrido muy prometedor.