Un nuevo caso de COVID-19 obliga el aplazamiento del Barakaldo-Laredo

Un nuevo caso de COVID-19 vuelve a golpear al Barakaldo. El pasado jueves, los jugadores del primer equipo se sometieron a las pruebas pertinentes y uno de los futbolistas dio positivo. Desde ese momento, toda la plantilla está llevando a cabo un confinamiento domiciliario al tratarse de contactos estrechos. Este hecho ha obligado a aplazar el encuentro frente al Laredo, estimado para este domingo a las 17:00 horas en Lasesarre. El club fabril ya lo ha anunciado de manera oficial en su página web. Asimismo, el choque del siguiente fin de semana ante el Amorebieta corre un gran riesgo de posponerse también debido a que, salvo giro de última hora, los futbolistas deberán permanecer en sus casas un total de diez días.

El Barakaldo podría estar tres semanas sin competir. La pasada jornada les tocó descansar y ahora todo apunta a que no solo se aplazará el envite ante el Laredo, sino también el del Amorebieta. El Juez de Competición de la RFEF ya ha confirmado el aplazamiento del primero de ellos. Sin embargo, todavía no ha notificado nada acerca del siguiente partido contra los zornotzarras. Aunque, si todo sigue su rumbo, los jugadores deberían estar confinados hasta el domingo 31 de enero como mínimo, lo que impediría la celebración de dicho encuentro. Los dos conjuntos vizcaínos deberán estar pendientes de la decisión de la Federación y Osakidetza, que parece que la tomarán la semana que viene.

El choque ante el Laredo se trataba de una gran final para los fabriles. El Barakaldo ocupa el farolillo rojo con solo cinco puntos. Esa zona de descenso la completan el Leioa -ocho puntos-, el Portugalete -9- y el propio Laredo -14-. Por lo tanto, el cuadro gualdinegro no puede perder ninguna oportunidad de sumar puntos para tratar de escalar puestos y reengancharse a la lucha por salir de esas posiciones tan comprometidas. 'El Charles' es un rival directo en ese sentido, que podía llegar algo tocado tras su derrota en casa frente al Amorebieta por 1-3. Además, los cántabros son endebles como visitantes, donde solo han sumado tres puntos. Los de la Margen Izquierda buscaban hincarles el diente, lograr su segundo triunfo esta temporada y que este encuentro supusiera un punto de inflexión para abandonar su pésima dinámica de resultados. No podrá ser este domingo.

No se trata de la primera vez en la que el COVID-19 azota al Barakaldo. Ya ocurrió hace más de un mes. En esa ocasión, un futbolista presentó síntomas y le adelantaron la prueba un día antes. El resultado fue positivo. Entonces, el jueves 3 de diciembre a la mañana, la Federación optó por aplazar el encuentro en el que los fabriles se verían las caras con el Portugalete y no se pudo jugar ese domingo. El asunto no se zanjó ahí. El siguiente choque que enfrentaba a los fabriles contra el Bilbao Athletic corrió la misma suerte. Los futbolistas debían permanecer confinados hasta el 12 de diciembre como pronto y tampoco pudo rodar el balón en Lezama ese fin de semana.

Finalmente, el derbi frente al Portugalete se jugó 17 días después de lo esperado, el miércoles 23 de diciembre. El Barakaldo perdió por 0-2 y esta derrota le acabó costando el puesto de entrenador a Aitor Larrazabal. En el caso del choque contra el Bilbao Athletic, las dos escuadras aprovecharon el parón navideño para enfrentarse el primer fin de semana del presente año, el domingo 3 de enero. Este ya fue el primer partido en el que los fabriles estaban a las órdenes de Germán Beltrán, aunque su debut en el banquillo no fue el esperado y sucumbieron por 3-0 ante un filial rojiblanco totalmente lanzado. Ahora queda por ver cuándo se podrá disputar el choque ante el Laredo y cerciorar si se podrá jugar frente al Amorebieta el siguiente fin de semana o, de lo contrario, buscar también una nueva fecha para este envite.