Orígenes secretos
Crítica de televisión ·
Mi historia favorita de cualquier superhéroe es la de su origen. El principio es, curiosamente, la pieza fundamental para entender cualquier final. Un origen bien ... cimentado es como un recuerdo de la infancia: lo puedes contar de mil maneras, pero el sentido no varía. Es lo que decía Steve Jobs en su biografía, «no olvides el porqué»; es decir, que si tienes claro cuál es el objetivo supremo, lo que da sentido a tu historia -a tu empresa, a tu familia, a tu vocación- las decisiones serán más sencillas; más nobles.
En este año de frustraciones compartidas, también hay cosas buenas. Cosas inesperadamente buenas. Pequeños detalles que, siendo absolutamente ajenos, sientes como triunfos personales. David Galán, el Kevin Smith español, escribe y dirige 'Orígenes secretos', una película española que habla del Capitán América, de Superman, de Batman, de Hulk... una auténtica carta de amor al tebeo escrita por alguien que tenía claro su objetivo. No puedo ni imaginar la emoción que debe sentir David al ver su película hecha.
Sin más: hecha. Hacer 'Orígenes secretos' es un pequeño milagro. Un ejercicio de audacia y tesón. Un éxito inimaginable hace unos años que ahora recorre el mundo entero a lomos de Netflix. Estaba viendo 'The Boys' y me he acordado de David y de 'Orígenes secretos'. Ambas aportan un punto de vista genuino al género de los superhéroes y creo que por eso son tan refrescantes. El caso es que estaba liado con Butcher, Patriota y el resto de la panda de Amazon cuando me ha venido un flash que quería compartir. Este: «Algún día David Galán tendrá un presupuesto así y verás». Porque 'Orígenes secretos' es un origen bien cimentado: el de David. Y ya veréis, ya.
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