La emotiva actuación de una banda de Getxo en 'Got Talent'
Dale Candela participó en el show para darle visibilidad a los enfermos de ELA, dolencia que padece su líder, Jaime, que derrochó alegría y buen rollo sobre las tablas
Dale Candela es una banda de rock de Getxo que se origina para visibilizar una enfermedad terrible, la esclerosis lateral amiotrófica. Todo surge cuando a Jaime, su líder, le diagnostican ELA. «A raíz de aquello, inspirados en su espíritu, decidimos hacer algo y creamos una asociación con un logotipo dibujado por el propio Jaime. Como es un amante del rock and roll, decidió ponerle banda sonora a esta enfermedad terrible», contaban sus compañeros. Dale Candela protagonizó uno de los momentos más emotivos y, al tiempo, festivos de 'Got Talent'.
La formación tomó el escenario del programa con mucha energía, tanto que los miembros del jurado se quedaron gratamente sorprendidos. «Lo vamos a hacer de la leche», avanzaban entusiasmados. «Hemos venido a que no se olvide nadie de nosotros», proclamaban antes de cantar. Y contaban lo que es la dolencia. «La ELA es una enfermedad degenerativa que afecta a la neurona motora que lleva el movimiento de los músculos por todo el cuerpo. Pierdes movilidad, capacidad de habla, capacidad respiratoria y, en última instancia, la muerte», explicaban. Y Jaime apostillaba: «No tiene tratamiento ni cura y la vida media es de tres a cinco años».
Lejos de presentar tristeza, derrochaban felicidad y buen rollo. «Con su apoyo, su impulso y su dirección, montamos esto para combatir esta enfermedad dándole visibilidad y tratando de concienciar a la gente», afirmaban. Uno de los amigos del afectado contaba cómo empezó todo. «En un principio, como mecanismo de defensa, Jaime ocultó su enfermedad, pero cuando empezó a tener síntomas evidentes de la misma lo reconoció», relataba. Dieron la espalda a la rendición y se pusieron en marcha.
«Nuestra gasolina es su positividad, su perseverancia y su fuerza de voluntad para demostrar que se puede seguir viviendo y ser feliz», contaba su hijo mientras Jaime presumía orgulloso abrazándole. En ningún momento se perdió la sonrisa y con la canción 'El día de la gran curación' sedujeron a público y jueces. Jaime tocaba la armónica. El despliegue de talento, coraje y fuerza fue admirable y así lo entendieron los expertos que soltaron una carcajada cuando, al acabar la interpretación, suplicaron al más temible de los jueces. Lo hicieron con música, como no. «Señor ten piedad», entonaba uno. Y el resto cantaba a coro: «Risto ten piedad». «Como se nota que habéis ido a coles de curas como yo», apuntó Mejide.
«No hay que tener piedad con la invisibilidad de algunas enfermedades ni con la gente que mira hacia otro lado. Pero al margen de eso, es que la canción mola, está muy bien», valoraba el publicista de gafas oscuras otorgando un sí. «Venís con un rollo alegre, tomando esto como una fiesta. Es un chute de energía para toda esa gente que está sufriendo», afirmaba Dani Martínez con otro sí. «Me parece una forma preciosa de poder visibilizar la enfermedad, pero lo que más me ha emocionado es lo bien arropado que estás. ¡Qué buenos amigos y familiares tienes!», zanjó Edurne antes de aprobar la actuación. Un triple sí que clasifica a una banda vasca llena de esperanza.
