Matellanes reclama un respaldo «decidido» para mantener la temporada de ópera en Bilbao
El presidente de la ABAO apela a «la confianza» en el inicio de temporada que ofrecerá 'I Puritani' con Jessica Pratt y Xabier Anduaga
La ABAO arranca la temporada este sábado en el Euskalduna con 'I Puritani' (Los Puritanos), de Vincenzo Bellini, una ópera que se ambienta en la Guerra Civil inglesa del siglo XVII, aunque en última instancia la trama tenga poco de drama histórico y mucho de culebrón. El reparto, liderado por la soprano Jessica Pratt y el tenor Xabier Anduaga, estará arropado por Euskadiko Orkestra a las órdenes de Giacomo Sagripanti. El montaje tiene el sello escénico de Emilio Sagi, garantía de elegancia y respeto a la partitura. Mimbres todos ellos que prometen mucho espectáculo.
Eso sí, más allá de la calidad de las representaciones, lo fundamental es que «haya confianza y apoyo por parte de todos, somos una iniciativa cultural que necesita de una colaboración pública-privada eficiente y con visión a largo plazo», subrayaba este martes en rueda de prensa Juan Carlos Matellanes, presidente de la ABAO. La pandemia ha motivado la baja de más de 700 socios y en la actualidad rondan los 3.200, muy lejos de los más de 5.000 que llegó a tener la entidad lírica en los años 90.
Matellanes apeló muy especialmente a la complicidad de los aficionados porque «no hay proyecto, por muy eficiente que sea, que se mantenga en el tiempo si no se respalda decididamente». En esa línea remarcó que la oferta de la ABAO no se dirige a «una élite o una minoría». Su objetivo siempre ha sido llenar el aforo sin marginar a nadie, con entradas que cuentan entre 41 y 261 euros. Los cinco títulos de la actual temporada, con 21 funciones, en el mejor de los casos podrían llegar a tener un público de cerca de 45.000 personas. La junta directiva aspira a colgar en cada representación el cartel de 'no hay billetes', de ahí que hayan apostado por 'I Puritani' para empezar con fuerza.
La ópera de Bellini recrea el enfrentamiento entre los puritanos protestantes que seguían a Cromwell y los afines a la saga de los Estuardo. Hay pasión, celos, un terrible malentendido y locura. Y lo mejor de todo: las famosas melodías bellinianas, sumamente largas y hermosísimas, que exigen al cantante un fraseo de tanta voluptuosidad y expresividad que parecen romper las costuras de la música.
«Es una obra cumbre del bel canto que presentaremos como se merece», destacaba Cesidio Niño, director artístico de la ABAO. En una ópera como 'I Puritani' hay que evitar las puestas en escena sobrecargadas. El montaje de Emilio Sagi –una coproducción del Teatro Real y el Municipal de Santiago de Chile– es muy simbólico y hasta surrealista, con escenas de mucho impacto visual, ya sea por el juego que dan 28 lámparas de araña en momentos clave o la impresión de una sombras chinescas detrás de una cortina.
Por su parte, Giacomo Sagripanti también hará valer su buen gusto al frente de la Euskadiko Orkestra. Hace pocas semanas dirigió en Nápoles esta misma ópera en versión de concierto con el pujante tenor donostiarra Xabier Anduaga y ahora esperan arrasar de nuevo en la platea. «Ofreceremos la edición crítica, con fragmentos que habitualmente no se interpretan», explicaba el director. En el elenco llama la atención la juventud de los protagonistas masculinos. Ni Anduaga, ni el barítono polaco Andrzej Filończyk, ni el bajo alicantino Manuel Fuentes llegan a los 28 años.
Química entre ambos
Los galones de veteranía le corresponden a la soprano Jessica Pratt, de 43 años, una artista consagrada a nivel internacional y muy querida por el público bilbaíno. «Esta es la cuarta vez que canto la edición crítica de 'I Puritani' y me siento muy cómoda», aseguraba la cantante australiana con una sonrisa. El aplomo y buen humor de Pratt actúan como un bálsamo en los ensayos, algo muy necesario en este tipo de óperas, donde cada error se sobredimensiona. 'I Puritani' es una obra endiablada, con notas estratosféricas, mucho virtuosismo vocal (sobre todo en el caso de ella) que exige un fiato (aliento) sin ninguna fisura, a la altura de un campeón de submarinismo.
Pratt y Anduaga han actuado recientemente en galas líricas y hay química entre ambos. Ahora es la primera vez que coinciden en una versión escenificada de 'I Puritani' y están dispuestos a ofrecer «una representación para no olvidar», en palabras de Cesidio Niño. La experiencia de ella y el ímpetu arrollador del tenor vasco son bazas que juegan a su favor. Sus voces empastan a la perfección y como profesionales también tienen sintonía. Anduaga ya ha tomado el testigo de sus ilustres predecesores. De timbre bellísimo, fraseo suntuoso y voz con cuerpo, lo tiene todo para seguir quemando etapas en una carrera ascendente.
Habitual del Real y el Liceu, tiene la agenda repleta hasta 2028. «Cantar en casa significa mucho. Y además en una producción como esta, en la que me encuentro entre amigos. Eso es fundamental, que haya buen clima de trabajo. Es la mejor manera de dar lo mejor de uno mismo. 'I Puritani' tiene una música espectacular y el público va a disfrutar muchísimo», anunciaba Anduaga con convicción.
