María Berasarte, profesional e independiente
La exfadista donostiarra se liberó estilísticamente en la segunda y última jornada del sexto Indie Festival universitario, donde desplegó su proyecto actual llamado 'Lurra eta bidea'
La tarde del jueves lo explicitó María Berasarte (San Sebastián, 1978) en uno de sus parlamentos sobre el escenario del ancho y blanco auditorio Mitxelena del Edificio Bizkaia de la UPV en Bilbao: «Yo he cantado fado, música sefardí, clásica… Soy independiente y soy muy alternativa. Este nuevo proyecto es un recordatorio de donde he venido». Es que estaba participando en el 6º Indie Fest, aunque su trayectoria sea canónica, y la agrupó con descaro y heterodoxia extras en una selección bautizada 'Lurra eta bidea' (Tierra y camino).
María intervino en el 6º Indie Festival, en su segunda y última jornada (la primera se celebró el jueves anterior, con Nueva Vulcano como atractivo principal), encabezando una terna de voces femeninas guipuzcoanas. Y ella, la única profesional de la plancha, se impuso por tablas, personalidad y seguridad escénica a las otras dos competentes participantes del cartel, dos nombres emergentes e indies (entiéndase lo indie como lo englobado el pop minoritario). Las otras dos fueron una nerviosa Eneritz Furyak, que ella sola con una guitarra acústica y sintes manejados con los pies descalzos cantó 7 piezas en 40 minutos de post folk crepuscular americano, y una muy introvertida Sara Zozaya, que en trío rotundo (¡vaya baterista más estupendo!) y con ella alternando guitarra y teclados pilotó un buen bolo de 8 temas en 50 minutos según una fórmula creciente desde lo flotante hasta las borrascas post-rock guitarreras.
Tras estos dos aperitivos, en un marco inusual para ella y ante un público alejado de su target objetivo, María Berasarte supo difuminar los hándicaps del entorno y demostrar su valía durante un concierto variopinto de 9 temas en 58 minutos en formato cambiante desde el dúo hasta el cuarteto completado por el guitarrista navarro Joseba Irazoki (el más indie de su grupo, pues ha tocado con Atom Rhumba, Nacho Vegas…), el baterista Igor Telletxea Irazoki (también de Bera de Bidasoa, como Joseba; Igor es batería de Urko, Petti y muchos más), más el contratenor tolosarra y pedagogo universitario en lo que a lo vocal respecta David Azurza (especialista en música antigua).
Ese del jueves fue un exótico y por momentos sorprendente viaje arrancado a dúo por Azurza y Berasarte, algo Dulce Pontes, con el cantando atávico a lo Beñat Achiary y ella replicándola con depurada afectación, con él tornándose monacal y ella haciendo ruido de goteras con su boca ('Origen'; este 'Lurra eta bidea' apuesta en parte por lo experimental), y de seguido María apoyada en la guitarra de Irazoki se marcó un blues a lo Ry Cooder para adaptar a Mikel Laboa con ella magnética, sensual, empoderada y bastante fadista ('Não es tu', con letra de Joseba Sarrionandia y punteo progresivo de Joseba Irazoki).
En 'MS' del sevillano Joaquín Calderón María sonó a Ana Belén, quizá más enfocada a su público natural (más mayor, no el universitario al que se dirige el Indie Festival), y en el popular 'Txori erresiñula' identificable por Imanol jugó a estirar y moldear las palabras mientras Irazoki frotaba la slide a lo Ry Cooder también. El combo se arrimó a Brasil en 'O que é? O que é?' de Gonzaguinha (con solo de batería final de Telletxea), a lo étnico y vocal llevaron el 'Rosa negra' del portugués João Gil, y al swing cabaretero el popular euskaldun 'Loriak Udan'.
El punto bajo, por menos sorprendente, fue 'Al alba' de Aute, encorsetado en un acompañamiento musical blusero excesivamente rígido. Pero Berasarte volvió a liberarse con la última pieza, compartiendo lid con el maestro David Azurza en otro atrevido juego vocal (con jadeos, tristeza, ecos…), explicado por ella así: «En este proyecto investigamos el origen de la voz, de los sonidos, del lenguaje. Es algo muy importante para los que venimos del mundo académico, tan riguroso». Un rigor que le ha facilitado a la donostiarra una base desde la cual arriesgar y salir bien librada, de ser una cantante profesional e independiente.