Vecinos de Deusto se rebelan contra la tala de olmos en Lehendakari Aguirre
Han recogido 1.800 firmas y convocarán una manifestación para denunciar la sustitución de estos ejemplares por arces tridentes
«Si hace falta, me encadeno a un árbol». La tala de olmos para la remodelación de la calle Lehendakari Aguirre ha provocado indignación entre ... los vecinos de Deusto. El Ayuntamiento anunció en la presentación del proyecto que pretendía sustituir 128 olmos «en mal estado» por 125 arces tridentes, una especie originaria de Asia «de alto valor estético, con menores interferencias con su entorno y con un crecimiento máximo de diez metros».
De momento ya han talado la mitad. Unos 60. Y los vecinos del barrio, constituidos alrededor de la plataforma Stop Tala Deusto, se están organizando para intentar «salvar» los que quedan. Por ahora han recogido unas 1.800 firmas y han convocado una manifestación el próximo lunes.
El Ayuntamiento sustituye el arbolado «cuando sus raíces se pudren, están secos o sufren heridas»
Denuncian que los olmos no están enfermos. Así lo asegura Irati Sanz, una bióloga contactada por la asociación. «Están frondosos y con las hojas verdes, no presentan los síntomas habituales de una infección en esta especie», asegura. El Consistorio, en cambio, sostiene que sus raíces están muy mermadas.
«Desde las instituciones hay una falta de empatía evidente. Nos venden ciudades verdes a 30 kilómetros por hora y después cierran los ojos», protesta Silvia Rodrigo, miembro de Stop Tala Deusto. «Estos olmos dan más sombra y generan más CO2 que los arces tridentes», cuenta indignada mientras explica que los nuevos ejemplares con los que se reforestará la avenida no son una especie autóctona.
«Son parte del barrio»
«Me entran ganas de llorar cuando me imagino la avenida sin los olmos. Varias generaciones hemos crecido con ellos. Son parte del barrio», explica Rodrigo. Según cuenta, en diciembre comenzaron a talar la parte de la calle más cercana a San Ignacio. «Sin previo aviso, y de un día para otro, el paseo cambió».
Hace una semanas volvieron a talar una treintena de ejemplares. Desde Stop Tala Deusto también denuncian la época del año en la que se están haciendo estos cortes, ya que «en verano todos los árboles tienen nidos con animales».
La menor altura (en comparación con los olmos) de los arces tridentes que el Ayuntamiento espera plantar evita podas agresivas. También contarán con una tela asfáltica que impida que las raíces dañen el alcorque.
En respuesta a una pregunta enviada por EH Bildu, el Consistorio explicó en febrero que el año pasado la ciudad ganó 340 árboles en calles y jardines, donde ya hay 35.007. En el anillo verde se plantaron otros 1.150. El Ayuntamiento aseguró que sustituye los árboles cuando sus raíces se han podrido, están secos, sufren heridas graves o han sido afectados por obras de drenaje.
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