Negra, pero no lo bastante

La polémica estalló con la difusión del tráiler de la película, sobre la que llovieron las críticas por el maquillaje para oscurecer tanto la tostada piel de Saldaña, de origen dominicano y puertorriqueño, como por la prótesis nasal que se colocó a la actriz para acentuar su parecido con Simone. Una avalancha de protestas incendió las redes sociales sugiriendo que otras actrices afroamericanas, como Viola Davis o Kimberly Elise, podrían encarnar el papel en lugar de Saldaña sin necesidad de «africanizar» sus rasgos.

«Mi madre creció en una época en la que le decían que su nariz era demasiado ancha y su piel demasiado oscura. Desde un punto de vista físico, Zoe no es la mejor elección», ha lamentado Simone Kelly, hija de la cantante, que pide abiertamente el boicot de la película. Los productores del biopic sobre la artista, compositora, pianista y activista defiende la idoneidad de Saldaña -con eñe en su pasaporte y Saldana en los créditos- en una cinta que recrea la tormentosa relación de una joven Simone con su mánager, Clifton Henderson, interpretado por otro actor negro, el británico David Oyelowo.

Saldaña, conocida por su participación en Avatar y Guardianes de la galaxia, publicó en Twitter un lema de Nina Simone que solo logró echar más leña al fuego. «Te diré lo que es la libertad para mí, no tener miedo nunca». «Encantadoras palabras, pero no vuelvas a poner el nombre de Nina en tu boca en tu vida», fue la airada respuesta a la actriz en la cuenta oficial de Nina Simone en Twitter, gestionada por los herederos de la cantante. «Esperemos que la gente comprenda que esto es doloroso, desgarrador y nauseabundo; que nos rompe el corazón y nos aplasta el alma. Se pasará, pero por ahora...» ahondó otro tuit oficial de los Simone.

Boicoteada por los blancos

Activa defensora de los derechos de la comunidad afroamericana, Nina Simone firmó temas como Four Women, To Be Young, Gifted and Black o Mississippi Goddam. En esta última denunció el asesinato de cuatro niñas negras con una bomba colocada en la iglesia baptista de Birmingham (Alabama) en 1963, y la muerte del activista Medgar Evers. La canción fue un himno del movimiento de los derechos civiles, pero la lucha de Nina Simone contra el racismo tuvo un alto coste para ella. Boicoteada por las audiencias blancas y prohibida en muchas emisoras, su hija Lisa ha contado cómo las radios devolvían sus discos destrozados. Muy afectada, Nina Simone se expatrió voluntariamente en Francia, donde falleció en 2003, con 70 años.

Robert L. Johnson, distribuidor de la película, dice que Saldaña no debe ser juzgada por su color, sino por su interpretación de Simone. «Lo más importante es que la creatividad o la calidad de los resultados nunca se deben juzgar en base al color el origen étnico o la apariencia física», dice Johnson, fundador de Black Entertainment Television (BET).

La familia de la cantante reclama el boicot de Nina, presentada en Cannes hace dos años, pero que llegará a los cines y a las plataformas de vídeo bajo demanda como Netflix el 22 de abril. Un documental sobre la vida de Simone, What Happened, Miss Simone? (¿Qué pasó, señorita Simone?) fue candidato al Oscar este año, pero sucumbió ante Amy, sobre los últimos días de la cantante Amy Winehouse.