«La Pasión Viviente tiene que salir sí o sí el próximo año», señalan en Arkotxa
Reconocida como Bien Cultural, son tres ediciones sin la escenificación que recuerda las últimas horas de la vida de Jesús, dos de ellas por el covid
Leire Pérez
Martes, 30 de marzo 2021, 22:02
En otra ocasión, a escasas horas de celebrarse las primeras escenas de la Pasión de Arkotxa, los nervios estarían a flor de piel, la incertidumbre por estar a la altura se apoderaría de los personajes más relevantes, empezando por Jesús, y los pocos hosteleros del barrio –tan solo dos– se estarían frotando las manos porque un evento multitudinario siempre se traduce en más caja. Sin embargo, nada de esto sucederá porque la pandemia se ha llevado por delante, por segundo año consecutivo, un evento que desde 2016 puede presumir de Bien Cultural.
El desasosiego que sufren quienes en Semana Santa están debajo de los atuendos es todavía mayor porque en 2019 tampoco llegaron a salir por problemas internos. El año pasado retomaron los ensayos con tan mala suerte que el virus dinamitó cualquier intento, a escasos días de que se fuera a sacar la cruz, para que tanto la parroquia del barrio como el parque de Olagane retrocedieran más de dos mil años.
Para Aitor Sainz, director creativo de la obra teatral e integrante de la asociación Gaztek-Abi, que es la que está detrás de esta maravillosa recreación, que «sigamos así un año después da mucha tristeza, más que el año pasado, porque entonces fue de repente. Este año hemos tenido todo el tiempo para digerir que no se iba a celebrar».
No ha habido posibilidad de reuniones, encuentros y menos ensayos. Contacto cero. «No nos hemos podido juntar, he ido de vez en cuando a los locales para ver cómo estaban los trajes y poco más», lamenta Sainz.
«Tenemos al Nazareno»
El responsable teme que una vez que pase este mal sueño haya problemas para celebrar la 54 edición. «Me da un poco de miedo, aunque espero que cuando se vuelvan a poner en marcha los ensayos, la gente se anime. En el barrio hay ganas de seguir y cuando podamos, yo creo que habrá mucha gente que se animará porque el año que viene, si la pandemia se soluciona, tenemos que salir sí o sí», avanza. Para cuando llegue ese momento ya está preparado hasta el Nazareno. «Iba a ser hace tres años, pero se ha ido alargando, a ver si a la cuarta va la vencida. Tenemos hasta el de dentro de dos ediciones», asegura. Y es que una vez que la Pasión vuelva a recorrer las calles de Zaratamo irá todo sobre rodado. «Hay que hacer el esfuerzo porque a partir de entonces saldremos el resto», detalla.
Mientras, la tristeza embarga cualquier esquina del municipio porque según recuerda el alcalde, Alberto Ugarriza, «se había retomado con mucha ilusión. Había un ambiente de cordialidad con el Ayuntamiento para que pudiera volver». Aún así, no duda en que la suspensión es la «decisión correcta». Las calles de Arkotxa no se pueden llenar de gente. Sería un grave error. «Desde el Ayuntamiento solo esperamos que lo retomen con la misma ilusión que nos trasmitieron el año pasado», comenta. Es consciente de que el evento generaría un «ambiente del que está necesitado la hostelería», pero no cabe otra, por lo menos ahora.