El 700 aniversario de Portugalete dispara el turismo a cifras récord
La villa recibió el pasado año 200.000 visitantes y espera mantener el tirón este año, centrándose en el 130 cumpleaños del Puente Colgante, efeméride con la que se venderá en Fitur
Cada vez hay más turistas que llegan a Bizkaia y se decantan por conocer los atractivos de la provincia, más allá de lo que ofrece Bilbao con el Museo Guggenheim como gran referencia. De esto se ha beneficiado Portugalete, localidad que ha logrado obtener en este pasado 2022 la mayor cifra de turistas de toda su historia. Según ha desvelado esta mañana su alcalde, Mikel Torres, unos 200.000 visitantes acudieron a conocer de cerca todos los encantos que posee y de los que presume la villa, entre los que destacan dos patrimonios de la humanidad, como son el Puente Colgante y el Camino de Santiago con la Ruta de la Costa que atraviesa la localidad.
En los últimos años antes de la pandemia, lo habitual era cerrar el ejercicio con una media de unas 130.000 visitas, como las que se contabilizaron en 2019. La celebración este pasado año del 700 aniversario de Portugalete ha disparado las cifras, pero también ha ayudado «el alza del turismo» a nivel general que se ha dejado sentir en muchos lugares del planeta tras las restricciones por el coronavirus, como ha apuntado el máximo regidor jarrillero. Este no ha dudado en afirmar que ahora el objetivo es «seguir consolidándose como uno de los principales destinos turísticos tanto a nivel de Bizkaia como de Euskadi».
Para ello esta próxima semana se plantará en Madrid, en la Feria Internacional de Turismo (Fitur), donde se colocará de nuevo un stand de la villa, para presentar una estrategia «muy dinámica» que ya ha desvelado que girará principalmente en torno al 130 aniversario del Puente Colgante, con el complicado reto de mantener ese elevado número de visitantes en los próximos meses. «Por las estimaciones que tenemos, este también podrá ser un gran año», declara ilusionado.
No será fácil moverse en el mismo escenario, ya que solo la concentración marítima de barcos antiguos en el Muelle Viejo y la feria marinera que se celebró a mitad de junio congregó a unas 70.000 personas. Pocos días antes, en el fin de semana en el que festejaba el acto central del 700 aniversario de Portugalete, la localidad jarrillera recibió a más de 40.000 visitantes que disfrutaron del extenso programa de actividades que se preparó para la ocasión.
Potenciar la basílica
Más allá de eso, según apunta Mikel Torres, este municipio vizcaíno ha logrado generar «un turismo que no solo es estacional, de los meses de verano, sino que empieza a ser regular durante todo el año, convirtiendo este sector en uno de los más sostenibles e importantes ahora mismo para Portugalete». Esto ha hecho de la oficina de turismo, que se encuentra en el paseo de La Canilla y que en los próximos meses se rehabilitará su tejado y fachada, uno de los lugares más demandados, en busca de información para no perderse ni uno de los monumentos y rincones que esconde este lugar, con un crecimiento de visitas del 85% respecto a 2021.
A la pasarela panorámica del Puente Colgante accedieron 70.772 personas, un 52% más que el año anterior. La basílica de Santa María, la que se han propuesto relanzar y potenciar de ahora en adelante, también duplicó el número de entradas para acceder a sus visitas guiadas, con 640 personas, entre ellos algunos llegados de países como Irán, Japón o Australia. Allí se atendió a unos 150 peregrinos. Estos últimos, coincidiendo con la celebración del Año Xacobeo, mantuvieron una ocupación media del 65% en el albergue de Zubi Alde. En total 2.174 personas hicieron uso de esta instalación, un 96% más respecto a 2021, con gente procedente de los cinco continentes. Para Mikel Torres todo esto tiene que ser, más allá de un logro ya del pasado, «una línea a continuar».
