«Sería posible erradicar la pobreza con un poco de compromiso político»
La Asociación Zabalketa de Getxo cumple 25 años haciendo labores de cooperación internacional
VIRGINIA URIETA
Martes, 27 de diciembre 2016, 23:38
Comenzaron a trabajar en Perú en un momento en el que una epidemia de cólera asolaba el interior del país. Y el obispo de una de las zonas afectadas, que era de Bilbao, colaboraba como misionero en ese momento. Les pidió ayuda circunstancialmente y eso precisamente fue lo que puso en marcha todo un proceso que desencadenó en el primer proyecto de ayuda de emergencia que la asociación Zabalketa hizo sobre el terreno. «Nos encontramos con un reto que requería mucha urgencia, y eso hizo que nos activáramos, conociéramos otra realidad y nos diéramos cuenta de que la sociedad que conocíamos no era el mundo. Aquello nos golpeó tanto que decidimos que no bastaba sólo con buena voluntad, había que profesionalizarse», relata Jaime Bernar, socio fundador de Zabalketa. Han pasado 25 años desde entonces, un cuarto de siglo de trabajo solidario gracias a una iniciativa que aunque nació sin tener un horizonte claro no ha dejado de crecer. Fue un grupo de ocho amigos del colegio Gaztelueta el que concluyó que «más que quejarnos de forma inútil debíamos buscar las soluciones».
Con esa sensibilidad pusieron en marcha el proyecto que años después cuenta con una amplia base social, tanto en Getxo como en Leioa, y que se ha erigido como un gran movimiento. Están presentes en Perú, Colombia y Bolivia (eje Andino), Nigeria y Filipinas. «África es el continente más cercano, donde en los próximos años se reunirá el 70% de la pobreza en el mundo. También Asia es gran parte de la población mundial, y no es posible entender la complejidad del mundo sin conocerla».
Tras realizar un diagnóstico establecen una línea de actuación y trabajan luego con las organizaciones locales. Los problemas mayoritarios son la falta de acceso a servicios esenciales agua, educación, salud y de ejercicio de derechos y libertades.
1.500 colaboradores
Y no pueden abordarse de la misma manera en cada lugar. Filipinas, por ejemplo, fue devastada hace dos años por el tifón que mató casi a diez mil personas, algo que ha hecho que todo su trabajo se haya volcado en la reconstrucción. Y en Colombia, por su parte,hay grandes desigualdades. Ahora, están centrados en el conflicto de las FARC, en los lugares donde vive la población desplazada. El mayor problema del siglo XXI es la falta de agua, y ellos han conseguido facilitar el acceso a ella con un método propio. Forman parte de la ONG cinco personas en el equipo técnico una de ellas en Bolivia de forma estable . Junto a ellos están 40 voluntarios y más de 1.500 colaboradores, a pesar de que las subvenciones viven un momento delicado. «Hace falta entender que el apoyo a la cooperación no puede ser una especie de premio que dan las administraciones en tiempos de bonanza. Hoy por hoy, sería posible erradicar la pobreza con el suficiente compromiso político. Pero parece tan lejano»