Fiesta en San Francisco tras la victoria de Senegal en la Copa África
Mané marcó el penalti definitivo de la tanda en la final contra Egipto y le ganó el pulso a Salah, su compañero en la Premier
d. meabe
Lunes, 7 de febrero 2022, 12:05
A la tercera fue la vencida. Senegal se alzó ayer por primera vez en su historia, después de dos intentonas frustradas, con la Copa de África ... . Para ello tuvo que imponerse a la hegemonía continental de Egipto, siete veces campeona del torneo. Los senegaleses afincados en Bilbao no quisieron dejar pasar la oportunidad y celebraron por todo lo alto el histórico triunfo de su país. Los aficionados se concentraron en los aledaños de San Francisco y Bilbao La Vieja pasadas las diez y media de la noche.
Música, timbales, banderas, aficionados corriendo de calle a calle... El éxtasis por la primera Copa de África de Senegal llegó hasta la capital vizcaína, aunque la victoria fue sufrida. Egiptó llevó la final hasta los mismísimos penaltis y ahí Mané marcó el tanto definitivo.
Tras las finales perdidas en 2002 y 2019, ambas con la presencia del actual seleccionador, Aliou Cissé -en la primera, ante Camerún, como jugador, y en la segunda, contra Argelia, ya de entrenador-, Senegal hizo anoche historia de la mano de la estrella del Liverpool. Mané no había podido entrar en juego de peor manera después de que Gabaski le adivinara en el minuto 7 la intención y le detuviera el penalti decretado tras el derribo de Abdelmomem a Ciss.
Senegal llevó la iniciativa durante prácticamente toda la primera mitad, aunque Egipto tuvo sus ocasiones. Entre ellas, una buena oportunidad de Salah, compañero de Mané en el Liverpool, que acabó el partido desolado. Ni siquiera tuvo ocasión de tirar su penalti en la tanda final, ya que se le había designado para el quinto lanzamiento, finalmente innecesario.
En la segunda mitad del partido, el juego siguió por los mismos derroteros, aunque ya a un ritmo más bajo. El mayor empeño ofensivo venía por parte de Senegal, mientras que Egipto, que tuvo que arreglárselas sin el sancionado entrenador Carlos Queiroz en el banquillo, luchaba para entrar en el juego y creó solo medias oportunidades, en una noche no demasiado feliz de su astro Salah. Diedhiou y Mané volvieron a estar a punto de adelantar a los senegaleses, pero se toparon con el buen hacer de Gabaski. Egipto tiene mucho que agradecer a su guardameta. Sin su actuación sobresaliente no habrían llegado a la tanda de penaltis. Consiguió mantener a raya las embestidas del rival tanto en el tiempo reglamentario como en la prórroga.
Senegal finalmente obtuvo su recompensa en la tanda de penaltis. Había sido con mucho el mejor sobre el terrenos de juego, aunque desperdició numerosas ocasiones que le podrían haber costado muy caro desde los once metros, a los que los egipcios fiaban su fortuna ayer por tercera vez en el torneo. Sin embargo, esta vez no les sonrió la suerte. Koulibaly, Dialló, Dieng y Sadio Mané -nombrado mejor jugador del torneo- marcaron para Senegal, mientras que Zizo y Hamdi lo hicieron para los egipcios. En el disparo definitivo Mendy le detuvo el tiro a Lasheen y la euforia se desató en Senegal, por primera vez campeona de África. «Esto demuestra que con trabajo, con verseverancia, sin desanimarse nunca, consigues lo que quieres», se felicitó exultante el seleccionador senegalés, Aliou Cissé. Le ha costado tres finales, pero ya tiene su Copa.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión