Investigan una denuncia por agresión sexual a una joven en las fiestas de Plentzia
El Ayuntamiento decidió parar las fiestas durante una hora y convocó una concentración en la plaza del Astillero donde se produjo el ataque
La Ertzaintza está investigando la denuncia por agresión sexual interpuesta por una joven durante las fiestas de las Madalenas en Plentzia, según confirmó el Departamento de Seguridad, que no aportó más detalles. El ataque se produjo esta madrugada en el recinto festivo, concretamente en la zona del Astillero. La víctima acudió a la Policía autonómica e interpuso una denuncia por los hechos.
El Ayuntamiento de Plentzia decidió suspender los festejos entre las 14.30 y las 15.30 horas como muestra de rechazo a este nuevo episodio de violencia machista. Después, se celebró una concentración de repulsa en la plaza del Consistorio, precisamente el mismo lugar donde se había producido el delito contra la libertad sexual. «Cualquier agresión merece una respuesta contundente», advirtió el recién elegido alcalde de la localidad vizcaína, Aitor Garagarza, de Bildu, en declaraciones a este periódico. El primer edil se puso en contacto con el responsable policial de la comisaría de Getxo, que cubre Plentzia, para ofrecer a la víctima y a su familia la ayuda del Ayuntamiento.
Tanto la Mancomunidad de Uribe Kosta como la asociación feminista del pueblo, Sorgiñen Alabak activaron sus respectivos protocolos para estos casos.
Ataque múltiple en 2021
Hace precisamente dos años, en el verano de 2021, se registró otra agresión sexual en Plentzia, esta vez en las fiestas de San Antolín, que se celebran a finales de agosto . La víctima fue una menor de 17 años y los presuntos autores tres chicos con distintos grados de autoría.
Fue una amiga de la adolescente la que dio aviso a la Ertzaintza sobre las dos y media de la madrugada de un domingo. Los hechos se produjeron en la playa después de que la muchacha se alejara de sus amigas. Al parecer, la cuadrilla se encontraba en la zona del espigón de Arkote cuando se separaron. Según la joven, un primer muchacho se sobrepasó con ella en el arenal en plena madrugada y en medio de la oscuridad, y después se unió a los tocamientos al menos otro chico más, que se iluminaba con la linterna de un teléfono móvil. Un tercero podría haber intentado mediar. Un testigo cifró en cinco los jóvenes que estaban en el espigón, algunos de los cuales agredieron presuntamente a la chica.
Según la denuncia de la muchacha, hubo una violación consumada. Tras ser atendida en el servicio de ginecología de un hospital y abrirse el protocolo de agresiones sexuales, la chica formalizó la denuncia por escrito en una sede policial. El caso generó un gran impacto en la localidad. Durante las concentraciones celebradas para condenar el ataque, los vecinos denunciaban que «se veía venir» después de un verano con actos de «vandalismo y peleas todas las noches» y en unos meses en que la población del municipio se multiplica. Los residentes y la propia alcaldesa exigían mayor presencia policial.