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Iñaki Orbezua con uno de los discos de su sello.

La pequeña fábrica de discos

El sello vasco Hanky Panky Records celebra hoy su décimo aniversario con una fiesta en el Kafe Antzokia de Bilbao. Iñaki Orbezua explica cómo ha sido esta aventura y su experiencia vital con la música

Isabel Ibáñez

Jueves, 17 de septiembre 2015, 00:40

El programa Flor de Pasión más de tres décadas en Radio 3 emitiendo el discurso pausado y la voz cálida de Juan de Pablos entreverado con preciosas canciones pop de los años 50 y 60-, tiene mucha culpa de la adicción musical del bilbaíno Iñaki Orbezua. Y si rebuscamos más allá, al principio de todo, también el disco Born in the USA. Porque aunque tuvo la suerte de respirar en su casa un ambiente escorado hacia la literatura y la música clásica, aquel joven Springsteen escuchado por vez primera a través de las ondas le voló la cabeza, como él dice. Y pese a que dirigió sus pasos a la abogacía, ha sabido acompañar su vida de lo que mejor le hace sentirse: Un buen disco sonando, CD o vinilo, no soy un talibán en esto, mientras leo y disfruto de la carpeta y los créditos sentado en un sillón, como si fuera un libro. Me gusta la música y me gusta experimentarla, no soy de ordenador ni de cascos en el metro. La gente joven tiene hoy 4.000 canciones en el iPod y concibe la música como un acompañamiento de fondo.

No se contentó con su condición de melómano; con unos amigos de la infancia (su hermano Edu, Rafa, Jorge y Roberto) puso en marcha una web que acogió una tienda online de discos a la que bautizaron Hanky Panky Records, y ya de paso pensaron que podrían darse el capricho de editar algunos CD y vinilos. Sin embargo, esta aventura coincidió con la mala ola de la industria musical y la tienda acabó cerrando. Pero quedó el sello que, desde 2005, y pese a ser prácticamente un hobby sin pretensiones económicas para sus responsables, ha editado una veintena de discos, algunos de ellos auténticas joyitas que no hubieran vuelto a ver la luz de no ser por esta iniciativa. Éramos fans de un tipo de música en concreto, -recuerda Orbezua- aunque luego cada uno tuviera sus preferencias, y en mi caso es cierto que he pasado horas y horas escuchando Flor de Pasión. Juan de Pablos colaboró al principio con nosotros, incluso nos ha escrito las notas para alguno de los discos. Nos ha descubierto muchos de los artistas con los que luego hemos trabajado, aunque es cierto que en Hanky Panky Records hemos editado cosas que estilísticamente no siguen la misma línea, porque nuestro objetivo es editar los discos que nos compraríamos. Recuerda con ilusión el primer disco de su sello, Into Your Ears de Pete Dello, líder de los añorados The Honeybus, un álbum maravilloso de 1971, fíjate, yo ni siquiera había nacido, un disco de culto de un artista que descubrí gracias a 'Flor de Pasión'.

¿Cómo funciona un sello pequeño y artesanal? ¿Cómo logra contactar con alguno de los artistas extranjeros? ¿Y cómo responden ellos a su a veces sorprendente propuesta de editar o recuperar alguno de sus discos? Tenemos mucha suerte con la gente con la que trabajamos, personas normales, accesibles , buena gente con la que negociamos, ponlo entre comillas, porque se parece más a la charla de un bar. A alguno, como al australiano Erik Voeks, al que hemos ayudado a traer de gira un par de veces por aquí, le localizamos a través de Facebook y contactamos con él, queríamos editar su próximo disco como parte de las celebraciones de nuestro aniversario, aunque finalmente el disco no va como Voeks quería y lo tuvimos que cancelar de momento. Pero, por lo general, les llamamos y les planteamos nuestra propuesta y les parece fantástico, siendo conscientes de lo que hay, de lo que les podemos ofrecer. Cuando contactamos con Mabel Joy para decirles que queríamos reeditar Wish I Was, un disco de los 90 que había pasado prácticamente desapercibido en su día, los tíos alucinaban. Lo vieron como un reconocimiento por volver a poner aquello en funcionamiento. ¿Nunca tienen problemas con las discográficas de origen? Los artistas con los que trabajamos son los propietarios del master, porque si hay que entrar a hablar con alguna discográfica donde el músico no tiene nada que decir, donde te pueden poner condiciones leoninas Así que llegamos a acuerdos con los artistas dueños de su música y hacemos una edición de x copias, empezamos haciendo mil, pero ahora solemos lanzar inicialmente 500, llegamos a un número limitado de gente y no es cosa de tener el trastero lleno de discos. Y luego les promocionamos y si están en activo les ofrecemos conciertos, les montamos una pequeña gira por España, alguno incluso ha salido en los Conciertos de Radio 3. Alguna vez les hemos intentado buscar un festival, pero somos demasiado pequeños para jugar en esa liga superior. Hacemos lo que podemos, llegamos hasta donde podemos llegar y los músicos lo saben.

Hanky Panky Records recibe entonces la música (el master del artista) y la envía a fábrica para sacarlo el CD, el vinilo o ambos formatos. Los hemos hecho en muchos sitios, pero especialmente en una fábrica de Chequia, aunque también en España, con empresas que actúan como agentes de la fábrica checa, e incluso en el País Vasco, en Erandio. Después lo venden sobre todo a través de la web o en tiendas como Power Records, en Bilbao. ¿Cómo aprendieron todo este proceso? Ninguno de nosotros habíamos trabajado en esto, fue autoaprendizaje, preguntando a la gente que sabía. No teníamos experiencia más que en fanzines musicales, fue todo sobre la marcha.

CD, vinilos ¿Y qué pasa con las cintas, justo ahora que la empresa estadounidense National Audio Company dice vivir uno de sus momentos más bollantes y anuncia el regreso de las casetes por todo lo alto gracias a un supuesto movimiento retro? Hay mucha pose en todo esto considera Iñaki Orbezua-. Yo no tengo la capacidad de distinguir en qué soporte se oye mejor la música, si en CD o en vinilo, depende de cada disco, de cada grabación Yo he vivido la época de las casetes, la única manera de poder acceder a discos cuando no tenías dinero, grabándolos de tus amigos, pero me parece que este regreso es como las barbas de los hipsters, una moda que pasará, porque no creo que sea el mejor formato para la experiencia musical.

Tras aquel estreno con Pete Dello, llegó el March Hare de Colin Hare, y una vez cogida carrerilla han editado a artistas locales tan conocidos por aquí como los excelentes y divertidos Santiago Delgado y los Runaway Lovers, hasta el momento la última apuesta de Hanky Panky Records. También a los gallegos Cosecha Roja y a otros reconocidos músicos internacionales como Andrew Sandoval, Alan Tyler & The Lost Sons Of Littlefield, John Howard, Kevin Junior, Band Of Outsiders Han editado incluso un libro, Exile On Main St-Rolling Stones de John Perry, y organizan conciertos cada semana. Detrás de todo esto (http://hankypankyrecords.blogspot.com/), la pasión de Orbezua y sus colegas: Sí, porque yo no lo definiría como una afición, es más que eso. Me aporta tanto a todos los niveles Somos personas distintas gracias a lo que hemos escuchado y leído sobre la cultura que se ha generado a través del rock, de la revolución cultural y sociológica que ha provocado. Como era de esperar, pedir a Orbezua que se decante por alguna de las joyas que atesora, aunque deja claro que él no es un coleccionista, es tarea imposible. Puedo decir, por ejemplo, que ayer volví a escuchar un disco de Sinatra que descubrí años atrás, 'Watertown', un álbum conceptual sobre un matrimonio en el que ella le deja a él, desde un punto de vista muy personal, y es un diso alucinante. La música, la interpretación, las letras No lo puedes poner en cualquier momento porque te echas a llorar.

Para celebrar la actividad de esta década de existencia, Hanky Panky Records trae hoy al Kafe Antzokia a una de sus bandas favoritas, The Bevis Frond, o lo que es lo mismo, el genio y figura de Nick Saloman, músico inglés activo en diversos proyectos desde finales de los años 60. The Bevis Frond publicaron su primer disco en 1986 y desde entonces, y a lo largo de más de una veintena de LP, han elaborado un canon de música en el que han conseguido una personalísima y original fusión de los sonidos de Hendrix, Wipers y Byrds, que les ha elevado de la categoría de banda de culto a uno de los más reconocidos combos de rock psicodélico de los últimos años. La noche se abrirá a eso de las nueve y media con unos fans de Bevis Frond, los hardpoperos catalanes Buscuit, -el mejor grupo de rocknroll de España según Kiko Amat-. Feliz cumpleaños.

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