Una vía verde entre Bermeo y Mundaka ampliará la red de senderos en la Reserva de Urdaibai

Las obras para la construcción del itinerario verde que conectará el centro urbano de Bermeo con el inicio de la vía peatonal en dirección a Mundaka, por la calle Txibitxiaga, comenzarán a finales de este año, tal y como han dado a conocer esta misma mañana la consejera del departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia. Los trabajos supondrán un desembolso de 2,3 millones de euros y se prolongarán a lo largo de nueve meses por lo que se espera que el futuro paseo esté practicable para el próximo otoño. «Con este camino daremos un importante paso en la conectividad sostenible y la movilidad lenta en la zona. La inversión ayudará también a la reducción de emisiones», ha explicado Tapia en su visita hoy a Bermeo.

La nueva vía verde contará con un recorrido de tan solo 500 metros, una distancia que a priori podría parecer corta pero que, por contra, tendrá una proyección larga al sumarse al extenso mapa de senderos de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, que en la actualidad abarca un terreno de unos 26 kilómetros. «Además supondrá también la conexión con el espacio natural de Tonpoi y Aritzatxu y, más adelante, incluso con las áreas de Matxitxako y San Juan de Gaztelugatxe», ha subrayado el alcalde de Bermeo, Aritz Abaroa.

La actuación afectará en concreto a la acera que discurre entre las vías del tren y la travesía de la BI-2235; un espacio «muy incómodo de andar por su estrechez», asegura Aitor González. Al igual que este paseante, muchos vecinos de la villa marinera recorren a diario este tramo de camino antes de alcanzar el itinerario verde hacia Mundaka. «Hacía mucha falta que lo ampliarán porque en algunos puntos, si te cruzas con otra persona, estás obligado a bajarte a la carretera con el peligro de atropello que ello conlleva», añaden otras dos personas que habitualmente transitan por la vía entre Bermeo y Mundaka.

La solución proyectada persigue generar «un itinerario natural, paralelo a la acera actual, a una cota distinta y un anachura constante de dos metros», han avanzado desde el Gobierno vasco. El objetivo del plan, por otro lado, es «la generación de un conjunto paisajístico y medioambiental en la zona, que se conciba como la antesala de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, mediante un diseño completamente diferente, mucho más naturalizado», han detallado asimismo.

La actuación se dividirá en tres zonas diferenciadas a lo largo de las calles Santamañe y Txibitxiaga. La inicial se corresponde a la parte de la acera más próxima a la estación de Euskotren, desde donde el itinerario natural se proyectará «en una ladera junto a un acantilado, aprovechando que desde este enclave hay unas vistas espectaculares al mar». Para ello, se ha planteado una pasarela de madera que se sobreelevará sobre la vegetación que se desarrolla en la parte inferior con el fin de ampliar las vistas al puerto y el casco antiguo de Bermeo.

La siguiente área se localizará en el mirador, próximo a la casa Kikunbera y también se actuará en una plataforma superior, en la que se habilitará una zona de esparcimiento. «Todos los trabajos del itinerario natural tendrán lugar fuera de la calzada, con el fin de interferir lo mínimo posible al tráfico de vehículos», avanzaron.

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