Siguen las colas de hasta hora y media para comprar el bono a Castro en el primer día de viajes gratis

Todo esto viene a cuento de que hoy entra en vigor el bono gratuito con el que el Gobierno español quiere potenciar el transporte público a los viajeros habituales en líneas de titularidad estatal. Son las líneas a Madrid, a Barcelona, a La Manga del Mar Menor, a Santiago de Compostela, a San Sebastián... Y a Castro Urdiales, que a veces se percibe casi como un barrio de Bilbao de tantos viajeros que mueve cada día.

Pues lo que ha ocurrido es que con tanta gente queriendo hacerse con el título de transporte, y con la cuestionable gestión de la empresa IRB Castro, ha sido un desastre. Una testigo de ello es Marian Díez: «Ayer (el martes) estuvimos cuatro horas esperando y no fuimos capaces de sacarlo». El problema es que sólo era posible hacerlo de forma presencial, en ventanilla, porque no funcionaban «ni las máquinas de la estación ni la página web». Además ocurría que «mucha gente venía con un montón de DNI para sacar el título a un montón de personas». En fin, que las colas, con más de un centenar de viajeros, apenas se movían.

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Hoy, sin embargo, la situación, siendo desagradable, estaba en otro nivel. Seguían sin funcionar las máquinas ni la web, pero «he venido pronto y he esperado hora y diez minutos», contaba con la tarjeta en la mano. Esa agilidad sobrevenida tiene que ver con dos cosas: «Ahora ya sólo admiten un título por persona», y además la empresa ha puesto a dos personas a hacer los trámites, y no solo a una como ayer. Son la viva imagen esos empleados de la eficiencia y la frustración, porque no ven compensado su esfuerzo educado con la reducción de una cola que no encoge, que se nutre todo el rato, pero que se mantiene formada por medio centenar de personas.

Cada una de ellas tarda unos tres minutos en hacer el trámite, incluyendo las preguntas recurrentes. ¿Hay que subirse siempre en la misma parada? Sí. ¿Y bajarse? No. ¿Cuántos viajes hay que hacer en tres meses para recuperar la fianza de 20 euros? Doce. ¿Hay que hacer ida y vuelta, o uno sólo cuenta como viaje? No hace falta ida y vuelta.

Adrián Castillo le sacó el título a su pareja porque ella trabaja en Castro. Hoy tuvo que viajar pagando porque no fue capaz de hacerse ayer con el bono, y esta mañana salió antes de que abriese la ventanilla de IRB. «Dijeron que iban a abrir a las ocho, pero lo hicieron a las siete, así que aunque llegué pronto ya había gente. Ha sido a partir de las ocho cuando se ha empezado a llenar esto». Algo más tarde se puso en la cola Joseba Márquez, a las 7.50, y logró terminar el trámite a las 9.30. «Algo más de hora y media que casi parece poco comparado con lo que había ayer». Como trabaja cerca de la Intermodal «vine un par de veces para ver cómo estaba el tema pero era tal caos que me fui». Vive en Castro, así que para venir hoy a Bilbao tuvo que pagar por última vez. Y, además, sufrir uno de los efectos indeseados y previsibles de la gratuidad: «El autobús que solía coger hoy venía lleno y tuve que esperar al siguiente, y caso no entro en él. Creo que luego pusieron otro más de refuerzo». Distintas personas han lamentado que durante esta mañana se han producido retrasos en las conexiones.

Lo de hacer ayer una prospección, desistir, y regresar hoy es algo que también hizo Daniela. «El martes me acerqué dos veces pero ni hice la cola. Vine a las dos de la tarde y luego a las cinco. Ni me quedé. Hoy no sabía con qué me iba a encontrar, y al final he estado hora y media». Mucho para un mundo en el que trámites bastante más complicados se pueden hacer on line. Pero poco para el caos de ayer.