Baskonia
Miller-McIntyre, la estrella búlgara por convenienciaEl baskonista, quien lidera a la selección del Este de Europa por la ausencia de Vezenkov, se beneficia del estatus que le procura su pasaporte
El lenguaje audiovisual del cine ha narrado historias sobre los matrimonios de conveniencia. Uniones que procuran réditos vitales, por lo menos, a uno de los ... contrayentes. Y también el deporte alberga parejas de hecho que satisfacen a ambas partes. Es el caso de la Federación Búlgara de Baloncesto, que se beneficia del talento -muy al alza desde que juega en el Baskonia- de Codi Miller-McIntyre.
Un acuerdo provechoso además para el base azulgrana, a quien el pasaporte del Este europeo le abre más puertas laborales y, sobre todo, eleva su caché al liberarse de la parte estrecha del embudo que encarnan los extracomunitarios. Un ejemplo similar al de Lorenzo Brown (Maccabi), nacionalizado español por la vía rápida que tanto contribuyó el último verano al oro continental de 'La Roja'.
Es cierto que Bulgaria no alcanza el rango de potencia de la canasta, pero una pieza completa como el intenso defensor, prototipo físico y afán vertical que representa McIntyre, le otorga un salto de calidad. El base que entrena Dusko Ivanovic ocupa el puesto de naturalizado que antes pertenecía a Dee Bost.
McIntyre debutó con su actual combinado en las ventanas abiertas hace justo un año para los compromisos de las selecciones. Y por la ausencia esta vez de Sasha Vezenkov, el ala-pívot que milita en Sacramento Kings, Codi lidera a su equipo nacional de adopción. Desde ayer participa en los duelos clasificatorios para el Europeo de 2025 que reunirá a 32 combinados en pabellones de Chipre, Finlandia, Polonia y Letonia.
El timonel del Baskonia estrenó deportivamente su documento la campaña anterior. En los seis partidos previos con Bulgaria, el monarca de los pases decisivos luce promedios de 11,8 puntos, 4 rebotes y 8 asistencias para sumar 16,3 créditos de valoración. Suecia y Alemania son los rivales de su grupo en este paréntesis abierto tras los torneos de Copa en cada país.
Por primera vez, la Euroliga detiene su centrifugadora que depara un calendario abrasador para ceder hueco a la ventana invernal después de las competiciones del k.o. Un amago de acercamiento entre dos organismos tan alejados como la FIBA y los dueños del mejor campeonato continental de clubes desde la escisión del año 2000 que, entre otras entidades, promovió el Baskonia con su revuelta.
A falta de Vezenkov, el último MVP y máximo anotador de la Euroliga porque la NBA no libera a sus jugadores para estos compromisos internacionales, Codi enarbola la bandera tricolor de Bulgaria.
Otros cuatro azulgranas
En esta apertura de ventanas con vistas al torneo continental por selecciones del próximo año también participan otros cuatro intengrantes de la plantilla azulgrana. Se trata de Sander Raieste, Maik Kotsar, Vanja Marinkovic y Nikos Rogkavopoulos.
Este póker de baskonistas disputa hoy el primero de los dos partidos oficiales y regresará a Vitoria tras la cita del lunes venidero. El alero y el pívot estonios juegan en Macedonia del Norte y recibirán a Lituania dentro de tres días. Al escolta serbio le aguarda esta noche el combinado de Finlandia y acabará en la Georgia de Tornike Shengelia. Y el 'tres' griego, uno de los fichajes estivales del Baskonia, obra hoy como anfitrión de la República Checa y rematará los compromisos el lunes en la cancha de Países Bajos.
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