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El partido se jugó a partir del plan trazado por Joan Plaza. La baja de Baldwin parece condicionar en exceso la organización de juego, que se escora demasiado hacia un Forrest individualista. La apuesta por Samanic y la confianza en Rogkavopoulos en el último cuarto, al menos, propició la recuperación.

No jugó.

Buenos números seguidos de sensaciones más dudosas. Momentos de brillo y apagones persistentes. No terminó de marcar el ritmo del partido.

Hace lo que puede para asumir el papel que le impone la ausencia de Baldwin. Escasa impronta en la dirección de juego.

Generoso en el reparto de juego, pero sin filo anotador. Triple fallado en la recta final con el que se escapó las opciones de recuperación.

No jugó.

Soporte ofensivo azulgrana y autor de un triple para reavivar las opciones azulgranas. Se ofrece incluso para ejercer de base si se tercia la ocasión.

Se echó a la espalda gran parte de la responsabilidad reboteadora que otros no asumían. Sin acierto en sus tiros y desconectado en la recta final.

Cortó su nefasta cadencia triplista con dos aciertos en el último cuarto. Casi siempre está detrás de los momentos de reacción azulgrana.

No jugó.

Alimentó su estadística durante la primera parte para decaer tras el descanso. Baja participación en el último cuarto.

Encontró su filón anotador a base de atacar de cara el aro andorrano. Menos contundente cuando tocaba fajarse cerca de los tableros.

De nuevo asentado en el quinteto inicial y con voluntad para buscar continuaciones hacia el aro. Sigue sin imponer su teórica superioridad física.

Pasó de largo a la hora de abordar cualquier tipo de responsabilidad en el rebote. Superado en energía por sus pares bajo los aros.