El uno a uno del Baskonia-Breogán: Howard, el mejor

Se entiende en parte la caída de tensión inicial tras el éxito europeo tan reciente. Pero los regalos iniciales fueron muy peligrosa. Mala defensa del ‘pick and roll’ y absoluta dependencia de Howard

Determinante. Es único. Metió 18 de los 27 puntos iniciales del equipo. A menos después por el cansancio que sí existe. Y otro partido resuelto con un triple suyo. 9 de 23 en tiros de campo.

Mal primer tiempo, que gobernó su oponente Sergi García. Mucho mejor tras el descanso, cuando pudo correr la pista y lanzar la angustiosa revuelta azulgrana.

Muy falto de confianza. El equipo, plano de ideas adelante, se atascó aún más cuando el base suplente tenía la labor de tomar las riendas.

No jugó.

Mal partido del escolta serbio. Estrenó su casillero a medio minuto del final (73-74) con un tiro en escorzo y desde el suelo ante el corpulento Sakho.

Muy en un segundo plano. Sólo una canasta y escasa aportación estadística tras su gran labor defensiva y de valores intangibles en Bolonia.

Con todo el respeto para el estonio, su entrada en el quinteto inicial parece una concesión al adversario. Menos de cuatro minutos y una pérdida por falta de entendimiento. Inseguro.

No jugó.

Despistes defensivos nada más salir al campo aventuraban otra jornada amarga. Se fue reponiendo con el transcurso del partido. Metió un triple.

El equipo se sustentó sobre la terna que formó él con Howard y Costello. Cerca del doble-doble, listo para recuperar balones y con la intensidad vertical que le define.

El mejor. Si Howard monopolizó la primera parte y resolvió con su triple definitivo, el pívot sostuvo la esperanza local. A un rebote del doble-doble y autor de triples importantes.

Destacado en el mal primer tiempo general por su visión de juego y entendimiento con McIntyre. Oculto después por un Costello de alto peso específico en el grupo.