Iñigo y Vivian, dos guardianes que no hacen prisioneros
La brillante actuación de los centrales contribuye de forma decisiva en la victoria en Vallecas, donde nadie había conseguido ganar esta temporada
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Siete cambios para insuflar aire fresco a un equipo que se vació ante el Barcelona
No había ninguna duda de que Marcelino García Toral revolucionaría el once titular después de la tremenda paliza física que se dio el equipo el ... jueves contra el Barcelona. Hasta siete cambios introdujo el entrenador del Athletic en la formación inicial, que de todos modos era reconocible y ofrecía garantías. El asturiano dijo en la previa que los rojiblancos habían corrido «casi 150 kilómetros en 120 minutos» frente al Barça, un derroche de energía que hubo que suplir con soluciones que estaban en el banquillo. Es verdad que los bilbaínos acabaron sufriendo en Vallecas, asfixiados por un lanzado Rayo, pero las mejores ocasiones fueron suyas y apenas concedieron opciones a su rival. Todo el mundo cumplió, hizo su papel y lo usó para envolver una victoria que supo a gloria.
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Impecable trabajo defensivo en el que sobresalieron los dos centrales
Es muy difícil hacerle daño al Athletic. El Rayo lo intentó de mil maneras posibles, por el centro y los costados, con pases interiores y centros que no siempre fueron precisos, pero siempre rebotó con el muro central de la defensa rojiblanca. Dani Vivian e Iñigo Martínez firmaron un encuentro extraordinario, prácticamente perfecto, en el que blindaron su portería y frustraron todas las intentonas locales. El de Ondarroa incluso se jugó el físico en una acción y remate de Álvaro para sacar su remate bajo los palos, acción que luego fue anulada por fuera de juego. Pero al vizcaíno no le importó estrellarse contra el poste con tal de alejar el peligro. Entre los dos completaron 19 despejes, cuatro remates bloqueados y ocho intercepciones. Sencillamente, rozaron la excelencia.
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El Athletic se convierte en el primer equipo en ganar en Vallecas
Nadie lo había hecho hasta que el Athletic puso ayer dinamita en los cimientos de Vallecas para volarlo por los aires y convertirse en el primer equipo que gana en el feudo rayista en lo que va de temporada. Los de Andoni Iraola presentaban una hoja de servicios de ocho victorias y dos empates, pero ahora lucen una cicatriz dejada por la garra del león. Un latigazo de Nico Serrano acabó con la fortaleza de los madrileños, que ya no son el anfitrión más poderoso de la Liga.
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El equipo conserva la piel dura: solo una derrota fuera de casa en la Liga
A nadie se le escapa que el Athletic es el rey de los empates, nada menos que diez en 22 jornadas de Liga. Ganar le cuesta un mundo -solo siete victorias-, pero para que pierda hay que bombardearle durante hora y media y aún así el éxito no está garantizado. Ni siquiera a domicilio. De hecho, los rojiblancos han hincado la rodilla solo una vez lejos de casa en sus 12 salidas. Fue en el Bernabéu, donde perdonaron la vida al Madrid. Es más, han sumado más puntos como visitantes (17) que como locales (14). Porque en San Mamés se han quedado de vacío cuatro veces.
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Una victoria fundamental para aproximarse a los puestos europeos
Marcelino torció el gesto cuando se le preguntó en la previa del choque en Vallecas si pensaba priorizar la Copa en detrimento de la Liga. «Tenemos la obligación de intentar ganar todos los partidos», dijo serio. El Athletic lo hizo ayer para conectar con la zona noble de la clasificación. Está a un triunfo de la sexta plaza, una batalla que debe mantener viva hasta el final y no renunciar a nada con independencia de su sueño copero.
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