De la batalla de San Mamés al infierno de Mestalla
Athletic y Valencia abren una semifinal durísima con errores arbitrales, reproches y acusaciones de antifútbol que dibujan una vuelta caliente
En San Mamés, el epicentro mundial de la intensidad en la noche del jueves, el Athletic y el Valencia libraron una batalla durísima, de cuerpo ... a cuerpo, que dejó cicatrices en las piernas y también en la memoria, desde ahora depositaria de un caldo de cultivo explosivo que se irá cociendo a fuego lento en las próximas tres semanas hasta alcanzar su punto de ebullición a comienzos de marzo.
Hubo de todo en el choque de ida de la semifinal de Copa, resuelto con un empate a uno, graves errores arbitrales, cruces de declaraciones y acusaciones de antifútbol enviadas al buzón valencianista. Los visitantes se quejaron amargamente de la labor arbitral, movimiento al que respondió con contundencia Marcelino García, y los rojiblancos dejaron caer que la propuesta de su rival restó belleza al espectáculo en La Catedral. La eliminatoria está en el aire y pendiente de sentencia en Mestalla, donde en un ambiente que se prevé caldeado se vivirá la segunda y definitiva entrega de un cruce apasionante.
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La semifinal copera descorchada en el volcán de San Mamés -más de 42.000 aficionados llevaron al Athletic en volandas- se cerrará en el infierno de Mestalla. Todo el mundo da por hecho que el guion será el mismo: intensidad, pelea, presión, físico, batalla por cada centímetro de la hierba y un estadio volcado con su equipo, el Valencia. Porque no habrá entradas para la grada visitante -el club che lo justifica por el impredecible comportamiento de la pandemia y las medidas restrictivas-, con lo que los rojiblancos estarán solos en un escenario adverso y cargado de electricidad. Allí, en la antigua casa de Marcelino, donde el asturiano fue feliz y ganó la Copa que ahora quiere traer a Bilbao, el Athletic deberá resolver una eliminatoria que nació guerrera entre los muros de La Catedral.
El propio Valencia ya se está encargando de subir unos grados la temperatura ambiente con vistas al duelo programado para el 2 de marzo, si no se cambia. El club publicaba ayer informaciones en sus redes sociales y algunas de ellas venían acompañadas de la etiqueta 'ADNBroncoyCopero'. Un 'hashtag' acuñado a raíz del choque en San Mamés. «Buenas días, afición. ¡Ahora le toca a Mestalla!» y «este equipo ha luchado contra todo» eran frases con las que se animaba a los seguidores chés a acudir en masa al encuentro de vuelta. El 1-1 de la ida ha dejado todo en el aire, al igual que algunos asuntos relativos a los estilos de juego, pérdidas de tiempo, penaltis no señalados, faltas mal interpretadas, denuncias por errores arbitrales e interpelaciones al VAR.
Los dos entrenadores fueron respetuosos uno con el otro, centrados en canalizar sus mensajes a través de la figura del colegiado. De alguna manera, Munuera Montero se convirtió en el elemento transmisor de quejas y reproches. José Bordalás calificó el arbitraje de «fantástico», pero cargó contra la tecnología. «Es difícil verlo en directo», dijo sobre la acción de Vivian y Hugo Duro en el minuto 90 en la que los valencianistas pidieron pena máxima. «Vimos la jugada luego y coincidimos que era penalti clarísimo. No entiendo que el VAR no lo revise y ayude al árbitro». El técnico alicantino invitó a su afición a acompañar al equipo en el choque de vuelta, encantado con la respuesta de sus hombres en San Mamés. «No era fácil (jugar) con este ambiente en contra».
Cruce de declaraciones
Marcelino recogió el guante y afirmó que el Athletic también tenía motivos para quejarse, «bastantes. Este partido no se puede llamar un partido de fútbol y él (Munuera Montero) tuvo importancia en el mismo. Pudo llevarlo de otra forma, que favoreciera el espectáculo. Vi situaciones más propias de Regional que de dos contendientes de Primera que jugaban una semifinal de Copa», apuntó hacia el árbitro y de paso señaló el 'método Bordalás'. «Los casi 50.000 espectadores vieron 44 minutos de juego», tiró con bala.
El árbitro a Williams: «No entres al trapo. ¿No ves que sales perdiendo siempre»
En el descanso del partido entre el Athletic y el Valencia, en el túnel de vestuarios, Yuri Berchiche e Iñaki Williams hablaron con Munuera Montero sobre las acciones de Diakhaby. El árbitro dijo primero al lateral: «Sabes como es él. No entres al trapo tío, ¿vale? Intenta evitarlo». Luego repitió con el delantero. «Déjalo ir. No entres al trapo. ¿No ves que sales perdiendo siempre?». «Ya sé, ya sé», admitió Williams.
En realidad fueron 50 de los 96 totales. Desde el empate a uno en el minuto 65, solo se jugaron 13 reales. «Es muy difícil cuando no se quiere jugar. Es algo que a nosotros no nos va y hemos intentado hacer lo contrario», dijo Raúl García. Carlos Soler no tardó en replicarle: «Prefiero no hablar de Raúl García porque se pasa casi todo el partido fingiendo». Mestalla dictará sentencia.
Los datos
22faltas hizo el Valencia por las 13 del Athletic, que en el último año solo recibió tantas en la final de Copa con la Real
50minutos reales se jugaron de los 96 totales. Entre el gol del empate (m.65) y el pitido final solo se disputaron 13
391pases del Athletic por los 291 del Valencia, con un 57% de la posesión rojiblanca frente al 43% visitante
3victorias del Athletic en sus últimas 35 visitas a Mestalla entre Liga y Europa League
las FRASES
Entrenador del Athletic
Marcelino García
«Este partido no se puede llamar un partido de fútbol y él (árbitro) tuvo influencia en el mismo»
Entrenador del Athletic
Marcelino García
«Vi situaciones más propias de Regional que de dos candidatos de Primera División que jugaban una semifinal de Copa. Hubo 44 minutos de juego»
Entrenador del Valencia
José Bordalás
«Vimos la acción y era penalti claro. No entiendo por qué el VAR no lo revisa y ayuda al árbitro»
Jugador del Athletic
Raúl García
«Es muy difícil cuando uno no quiere jugar. Es algo que a nosotros no nos va e intentamos lo contrario»
Jugador del Valencia
Carlos Soler
«Prefiero no hablar de Raúl García porque se pasa casi todo el partido fingiendo»
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