El Athletic hace llegar a Merquelanz que cuenta con él si no renueva con la Real

Hasta ahora, las maniobras de la formación rojiblanca se han ceñido a trasladarle por distintos canales sus intenciones futuras. El reglamento de FIFA sobre la transferencia de futbolistas limita la negociación con otro club a los seis meses anteriores al vencimiento del contrato y es algo que el Athletic tiene muy claro que debe respetar. Las relaciones entre los dos clubes desde la llegada de Aitor Elizegi a la presidencia han mejorado respecto a años atrás y desde Ibaigane se desea mantener esa relación cordial y de respeto con las oficinas de Anoeta.

Así las cosas, la estrategia del Athletic pasa por esperar siete meses hasta el 1 de enero para, a partir de esa fecha, abrir conversaciones con el jugador de cara a su contratación. Siempre que no haya renovado antes con la Real, por supuesto. Su cláusula de rescisión es de 50 millones y el Athletic, lógicamente, no se plantea afrontar esa cantidad este mercado cuando dentro de un año queda libre. Es una situación similar, aunque en la dirección contraria, a la que sucedió el verano pasado, cuando el guardameta Álex Remiro desembarcó en Donostia tras haber expirado su contrato allí.

El 19 de febrero, el 'Diario Vasco' ya desveló que Merquelanz, estaba apuntado en rojo en la agenda de Rafa Alkorta. EL CORREO ha tenido constancia de que el director deportivo del Athletic ha seguido muy de cerca el rendimiento del futbolista de Irún en Anduva, donde se ha convertido en uno de los futbolistas más destacados de la categoría. Es más, se trata de un interés que viene de lejos, ya que en 2012, cuando era juvenil y jugaba en el Antiguoko, el Athletic intentó su fichaje, aunque entonces prefirió quedarse en la Real.

En cualquier caso, cualquier opción del Athletic pasa por que la Real y Merquelanz no acaben entendiéndose. Las conversaciones para su renovación se iniciaron a principios de año y en estos cinco meses no ha habido avances significativos, por lo que las posiciones entre las dos partes permanecen alejadas.

El extremo fronterizo, que el 12 de junio cumple 25 años, está ante la oportunidad de firmar su primer contrato como profesional en Primera después de que dos graves lesiones de rodilla hayan retrasado su carrera deportiva. Compañeros de su misma generación en Zubieta llevan varias temporadas en la élite, casos de Odriozola y Bautista, con cerca de cuatro años a sus espaldas, o Luca Sangalli, que cumple su segunda campaña en la Real.

Por el contrario, Merquelanz solo ha podido hasta ahora jugar en el filial y esta temporada en el Mirandés de Segunda, donde ha cuajado un excelente rendimiento. Sus números, con 13 goles y 10 asistencias en 33 partidos oficiales, le han convertido en la revelación de la división de plata y en un jugador más que apetecible. Sin ser un goleador, solo Stuani (Girona), Luis Suárez (Zaragoza) y Yuri (Ponferradina) han firmado más tantos durante el curso, contabilizando también la Copa.

El obstáculo más importante a salvar para llegar a un acuerdo reside en si se le cataloga por su presente o por su futuro. Es decir, si se le valora por lo que ha hecho o por lo que puede hacer. La Real tiene muchas esperanzas depositadas en él y por eso quiere renovarle a toda costa, pero normalmente ofrece contratos en función de la evolución del futbolista para no pillarse los dedos. Y conforme éste va ganando peso en el equipo y en la categoría, los mejora. Así acaba de ocurrir, por ejemplo, con las renovaciones de Le Normand y Gorosabel. O hace dos veranos con las de Zubeldia y Oyarzabal.

Sin embargo, no es habitual que alguien llegue a los 25 años sin haber jugado en Primera División y tener varias propuestas para hacerlo. En enero el director deportivo del Mirandés, Chema Aragón, ya desveló que Merquelanz tuvo «cuatro ofertas de clubes de Primera» para salir en invierno que trasladó a las oficinas de Anoeta.

Por otro lado, a nadie se le escapa que en las posiciones de vanguardia es donde la Real acumula más talento y los contratos son más largos. Y aunque desde un punto de vista deportivo la competencia no es un problema, ya que Merquelanz puede jugar en varios puestos, tanto en los dos extremos como de mediapunta, sí entiende que tiene una gran competencia por delante y a sus 25 años no quiere dejar pasar más el tiempo. En el Athletic, por contra, tendría menos rivalidad para encontrar huecos en el once titular.

Mientras tanto, Merquelanz se ejercita con el Mirandés con la intención de cerrar la temporada con un buen sabor de boca. La Real ya le ha comunicado que la próxima campaña regresa a Zubieta para formar parte del primer equipo y le hace mucha ilusión jugar en Primera, tal y como ha manifestado públicamente en varias ocasiones. Hasta ahora solo pudo hacerlo unos minutos en su debut en Ipurua en 2018, el día que cayó gravemente lesionado.

Precisamente esos contratiempos físicos han sido los que han impedido al futbolista deseado por el Athletic tener un puesto en Primera División. Porque a esa grave lesión en su rodilla en septiembre de 2018 -rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha- se sumaba a la misma lesión en la otra rodilla en enero, durante un partido con el equipo filial en El Sardinero. Dos graves contratiempos que ha podido dejar atrás.