Una cita para reafirmar convicciones
El Alavés afronta ante el Andorra un choque exigente que devolverá al once a algunos de los titulares tras su descanso contra el Albacete
El Deportivo Alavés cierra esta tarde en el Estadi Nacional de Andorra una semana complicada. Exigente, con muchos elementos para la reflexión, pero que también deja un incuestionable regusto amargo. De la derrota en Burgos, la primera de la temporada, al empate contra el Albacete que supo a poco. Dos choques en los que el equipo se dejó por el camino puntos valiosos y, sobre todo, algunas sensaciones que sí había experimentado en encuentros anteriores. El Andorra plantea, a su forma, otro escenario complejo donde debe desenvolverse el equipo de Luis García para superar sin sobresaltos el primer ligero bache de la temporada.
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Un contexto de partido similar al que vivió contra Las Palmas. Entonces, el cuadro canario aterrizó en Vitoria con una propuesta muy definida y el Alavés le dejó hacer. Durante muchos minutos, apenas le discutió la posesión. Así estaba diseñado en el plan de partido, como muchas veces ha recalcado un Luis García que cree que el encuentro se jugó a lo que su equipo quiso. Es decir, a que el rival tuviera la pelota siempre lejos de zonas de peligro para que le costase generar ocasiones. Solo tuvo una, la del gol del empate. Ahora el escenario es similar, aunque ante un equipo con un gen dominador todavía más marcado. Una escuadra en la que el portero y los centrales tocan la pelota más que los centrocampistas. Todos, con la firme consigna de no rifarla y de buscar siempre la opción más cercana para dar continuidad al juego. En ese contexto, eso sí, García aspira elevar sus prestaciones en una faceta respecto al encuentro ante Las Palmas de hace unas semanas. «Quiero tener más la pelota», explicó en la previa.
El Alavés se ha mostrado relativamente cómodo en ese escenario. Es más, hasta ahora ha dominado con mayor fluidez los contextos de partido en los que le toca esperar y responder. Cerrar los huecos y salir al contragolpe aprovechando los espacios. Generarlos de esa forma y no a través de la posesión, algo que no logró ni ante el Burgos ni frente al Albacete.
El albiazul «un equipazo»
García también apeló a crecer en «acciones individuales, calidad y decisiones buenas». Para ello, hará cambios. Contra el Albacete entraron seis caras nuevas con rendimiento desigual, aunque ninguna de ellas logró romper las jerarquías de la plantilla. Así, el técnico apunta a conformar un once similar al que había jugado hasta ahora. Con la probable continuidad de Arroyo por un Tenaglia aún algo justo, y el probable regreso de Duarte a la banda izquierda. También estará Guridi, sin un recambio claro en el equipo y al que dio un premeditado descanso al final del choque del miércoles. Un bloque que pueda correr, pero con talento para, una vez recuperada la posesión, mantenerla y poder llevar el ritmo con ella.
Los locales, que solo tienen la baja del lesionado Petxa quieren volver a ser «dominadores». Así lo aseguró en la previa su técnico, Eder Sarabia. También advirtió sobre la calidad albiazul. «Es un equipazo, con muchos recursos y será un partido bonito. Habrá que estar muy atentos a sus transiciones y si no les presionamos bien pueden sacar bien la pelota desde atrás», explicó.
Posible once del Alavés
