Diálogo a media voz

Hasta del «disfrutar sufriendo» de Dusko Ivanovic tiró el responsable de la confeccción de la plantilla albiazul para indicar cuál debe ser el modelo a seguir sobre el césped. No por nada Sergio Fernández, con contrato hasta 2026, va camino de alcanzar una década en un club donde entre los empleados se estila más la puerta giratoria que el párking de larga estancia. En definitiva y por ahora, un diálogo a media voz en las comparecencias públicas veraniegas de las dos figuras más importantes del organigrama deportivo. Similar al que se pudo escuchar en las salas de prensa el verano anterior, después silenciado por el excelente arranque de competición alavesista. Nada mejor, desde luego, que ambos pudieran dedicarse en breve a valorar temas estrictamente futbolísticos. No será sencillo hasta esa medianoche del 1 de septiembre, fecha del cierre del mercado.

¿El poso del primer partido al margen del resultado? Buenas sensaciones sobre la capacidad alavesista para distribuir el juego. Ese póker formado por Guevara, Blanco, Guridi y Benavídez que, mínimamente acompañado de recursos ofensivos, debería dar al conjunto vitoriano posibilidades de ser una amenaza en el área rival. ¿Individualidades? Un Rafa Marín que pese a errar en acciones puntuales dejó el sello de central más que interesante. Un Guevara que eleva claramente el nivel en la zona ancha. Un Kike García que en apenas media hora dejó claro que mantiene esas señas de identidad de tipo rocoso y depredador del área. ¿Son suficientes refuerzos? Evidentemente no, más aún tras la grave lesión de Giuliano Simeone. El frente de ataque sigue bajo mínimos. Quizás sea eso lo que lleva a algunos expertos en la materia a colocar en sus predicciones al Alavés en el fondo de la tabla. El gurú Julio Maldonado ('Maldini') ve a los albiazules últimos a final de temporada. Que alguien se encargue de desmentirle.

Por ahora toca la inminente visita del Sevilla a Mendizorroza. Ese equipo al que solo los penaltis separaron el miércoles de batir al campeón de Europa, el Manchester City dirigido por Guardiola. El conjunto andaluz se presentará en Vitoria tras caer también en la jornada inicial en su estadio ante el Valencia. Con esa sensación, por tanto, de que la escuadra que dirige el exalavesista Mendilibar necesita cambiar el guion de inmediato. Nunca se sabe, pero a priori un contexto peligroso. En el recuerdo, aquella eliminatoria de Copa del pasado enero donde los vitorianos cayeron (0-1) con gol de Rakitic. En un duelo disputado en Mendizorroza que bien pudo suponer la clasificación alavesista para los cuartos de final del torneo tras un partido notable.

Ahora se trata de, como mínimo, puntuar el lunes y evitar una salida en falso en las dos jornadas iniciales. En uno de esos partidos donde una lectura atenta de las alineaciones explicará que la capacidad técnica del adversario multiplica la albiazul. Ya se sabe que para el Alavés cerca de la mitad de los partidos de la temporada serán así. Es decir, buscar la manera de contrarrestar y hacer daño a adversarios simplemente superiores.