Vitoria pasa un Halloween de miedo

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A Vitoria le ha llegado la hora de elegir. Y para quienes dudan en su respuesta, Wally y Oier advierten: «Vitoria, ¿quiéres pasar una noche de miedo?», asustan, vestidos de payasos ensangrentados de pies a cabeza y desatando el pánico por la calle de la Provincia. Y van en serio: «Nos hemos echado toda la sangre por encima». En la entrada a la plaza de España, convertida en una especie de boca de acceso al pasadizo del terror por esps pavorosos personajes que descansan en las terrazas, Joseba Castaño y Verónica Catediano. Caracterizados en el personaje de la película La Purga, afilan apaciblemente sus cuchillos. «Es una noche de mucho miedo».

Así que más vale llenar esas bolsitas con forma de calabaza como la que portaba la pequeña Eider. «Quería salir de bruja y lleva todo el día deseando que llegase este momento», comenta su madre, su ayudante en esta dulce misión. «¡Quiero conseguir miles de caramelos, todos!», apuntaba, tras conseguir los dos primeros premios. Rebeca Arregi, disfrazada de catrina, también ayudará a sus hijas. «Hemos necesitado una hora y media para prepararnos». Confían en que tanto sacrificio les dé sus frutos.

Un esfuerzo que también se esconde detrás de los disfraces de la cuadrilla de Markel Bermejo, Mikel Regalado y Paula Ortiz. «Llevamos más de un mes hablando para decidir de qué nos disfrazaríamos este año». Y finalmente lo han hecho de monjas. «Buscamos lo que nos hacía falta y hemos quedado a primera hora de esta tarde para preparanos. Vamos a pasar una noche de miedo. Es una noche especial que se disfruta más si te metes en el papel». Vaya si lo han conseguido. No eran el único grupo que había planificado su terrorífico disfraz.

La cena, con mucha presencia de golosinas, ha sido el postre a una tarde cargada de actividades. En Lakua-Arriaga han disfrutado con los actos preparadas por la asociación de vecinos con manualidades infantiles, juegos gigantes y un taller para preparar talos. En Zabalgana, a los talleres y cuentacuentos les ha seguido una discofiesta, al igual que en Ibailakua, donde además han tenido también un concurso de disfraces. Misma apuesta han seguido en Goikolarra y en Abetxuko, por su parte, los vecinos han tenido la misión de resolver el misterio del escritor fantasma.

Y tras la medianoche, parte de la fiesta se trasladará a las discotecas. La Ertzaintza ha inspeccionado a lo largo del día dos discotecas de Vitoria para «velar por la seguridad» en esta noche de Halloween. Los agentes han revisado si en los diferentes locales se ha realizado algún «cambio en su funcionamiento» o si se ha colocado «alguna decoración que no cumpla con la normativa», para evitar episodios como el ocurrido recientemente en Murcia.