Vecinos y comercios del Casco Viejo de Vitoria siguen sin fibra óptica año y medio después

Esta tecnología básica para poder trabajar o hacer uso de internet con una mínima calidad sigue sin llegar a buena parte del vecindario (se calcula que hay unas 300 viviendas afectadas). Los afectados se ven obligados a utilizar otras alternativas –datos móviles, wifi público o un router– con «constantes» problemas de conexión, algo que coinciden en tachar de «vergonzoso» en plena era del internet ultrarrápido.

¿Por qué no ha sido posible aún esa actualización en el barrio histórico de la ciudad, rodeado por un Ensanche tecnológicamente bien dotado? El motivo es que carecen de la infraestructura necesaria para llevar el cableado hasta sus viviendas. Esto afecta a diversas manzanas en calles como Herrería, Zapatería, Las Escuelas o Pedro Egaña. En el problema hay implicadas tres partes: los propios vecinos, las teleoperadoras y el Ayuntamiento.

Existe el importante hándicap de que la normativa urbanística del barrio (el Plan Especial de Rehabilitación Integrada del Casco Medieval, PERI) veta el cableado aéreo, que sería la solución «más sencilla» a juicio de los afectados. Inicialmente el Consistorio anunció que posibilitaría esta alternativa de forma «excepcional», pero lo acabó paralizando, para enfado de los residentes.

Ahora, el Ayuntamiento informa de que realizará las obras de canalización necesarias «entre la calle principal y el portal» de 17 comunidades de propietarios, y tiene una «lista abierta» para otros bloques que quieran solicitarlas, transmiten a este periódico portavoces del Departamento municipal de Espacio Público y Barrios. Los interesados pueden acudir a la oficina de atención del barrio (Pintorería, 45).

Sin embargo, todavía no concretan un plazo para la ejecución de estos trabajos, ya que aún se está ultimando el pliego de contratación. «Intentaremos ir lo más rápido. Pero a veces los plazos administrativos son más lentos de lo que nos gustaría», indican desde el área que dirige la concejala Beatriz Artolazabal (PNV). Según explican, se han concluido los estudios con geo-radar y se ha hecho una primera labor de campo para localizar las acometidas que faltan. El Consistorio, señalan, asumirá las tareas de canalización hasta el portal, en el cual dejarán una arqueta «para que luego los vecinos hagan los trabajos hasta sus respectivos domicilios». Y para costear esas labores, añaden, pueden optar a ayudas económicas a la rehabilitación de la sociedad municipal Ensanche 21 (1 millón de euros este año). Eso sí, los vecinos advierten que son obras «costosas» y ven «dificultades» para aprobarlas en muchos portales.

De su lado, el Departamento de Urbanismo en manos del edil Borja Rodríguez (PSE) apunta a «facilitar las acometidas para extender la infraestructura en zonas donde la implantación presenta mayores dificultades» y agrega que se hablando con las operadoras. Pero advierte que «no es competencia municipal determinar cómo se lleva a cabo el despliegue de fibra en el Casco Viejo, sino que atañe a las operadoras». Las compañías (entre ellas DIGI y Telefónica) vienen trasladando que siguen pendientes de los permisos necesarios por parte del Consistorio para esa labor.   

Mientras, el problema persiste para desesperación de los afectados. «Hay una incertidumbre absoluta y un desconcierto por parte del Ayuntamiento», censura el portavoz vecinal Manu Arakama (Gasteiz Txiki). «Reclamamos una solución». Para la agrupación de comerciantes Gasteiz On resulta «asombroso que casi 2 años después sigan igual». El problema «resta competitividad» al vecindario, alerta.

Así lo hace constar Iñigo de Marcos, de Txik Txak. «Cada cierto tiempo se me va la conexión; 1 hora, 3 horas o 3 días. No puedo trabajar». «Es vergonzoso que esto ocurra en pleno centro de la capital de Euskadi», recrimina Josune, administradora de uno de los bloques afectados.