Una de cada cuatro empresas de Álava alerta de una «recesión» en la economía

Es una de las conclusiones de la encuesta realizada por SEA Empresas Alavesas durante el primer trimestre del año que está en curso con el objetivo de «evaluar la situación actual del tejido empresarial alavés y conocer las previsiones para los próximos meses». En el sondeo han participado más de 175 empresas alavesas, segmentadas en seis sectores, lo que «nos permite tener una visión muy exacta del impacto».

Bien es cierto que frente a esa cuarta parte que advierte de nubarrones en el horizonte, la gran mayoría (el 57%) ve que la situación actual del mercado es de «normalidad«». Y además, para los próximos meses la previsión es algo mejor a la actual. Otro posible signo de alerta es que, como recoge otro aspecto de la encuesta, disminuyen las empresas con cartera de pedidos alta del 25% al 19% si se compara con el informe de noviembre de 2023.

El sondeo refleja que las exportaciones aguantan frente a un acentuado descenso de ventas en el mercado nacional. Porque hay un 37% de empresas que han visto reducidas sus ventas en ese ámbito -este dato empeora en 19 puntos porcentuales-, mientras en las ventas al exterior el dato desciende en cinco puntos, del 20% al 25%. «En este baremo Álava demuestra su potencial exportador, un mercado donde las cifras se asemejan bastante a las de 2023 en la mayoría de los casos, pero es en el mercado nacional donde se aprecia un descenso que afecta al 37% de las empresas encuestadas», analizan desde SEA.

En términos de puestos de trabajo, en un momento en el que Álava acaricia el pleno empleo, la creación de puestos ha sido igual o superior para el 87% de las empresas, según la analítica. Mientras que el 86% de las firmas mantendrán o aumentarán la plantilla en los próximos meses, un indicador que baja en 7 puntos porcentuales.

Hay otros datos mucho más favorables. Y es que un 78% de las empresas encuestadas ha tenido mejores o similares resultados que el año pasado, un ámbito que experimenta una mejora de 10 puntos. Si bien, el margen de rentabilidad ha disminuido para el 23% de las empresas (con 19 puntos menos), en una media del 10%. Y el coste total de los aprovisionamientos ha aumentado para el 52% de las empresas.

La encuesta de SEA Empresas Alavesas ha pulsado también las principales inquietudes y demandas del tejido productivo alavés. La dificultad de contratación de trabajadores y los costes laborales es lo que más preocupa, para el 66% y 72% respectivamente. Disminuye la preocupación por los precios de las materias primas del 57% al 46% y los precios energéticos del 36% al 22%. Todo ello, sin olvidar el absentismo y la inseguridad del marco jurídico laboral.

Como apuntan desde SEA, el listado de preocupaciones de las empresas alavesas «ha experimentado un cambio en el último semestre que sitúa al frente de este informe las dificultades para contratar nuevos profesionales, los elevados costes salariales y el absentismo». «Esta clasificación obedece, también, a la moderación del precio de materias primas y los costes energéticos, dos factores que siguen siendo capitales en el día a día de las empresas, pero que han sido relegados por una realidad patente centrada en las personas».

Como destacan, «no sorprende este vuelco en las demandas empresariales cuando desde hace tiempo la captación y retención de talento se ha convertido en un verdadero reto para Álava donde, además, se registran índices desconocidos hasta ahora de ausencias laborales por bajas médicas, con un indeseable récord de 10.000 trabajadores al día».

Hay una petición cada vez más demandada: la reducción de la fiscalidad empresarial, algo que urge el 80% de las empresas encuestadas (con una subida de 11 puntos). Hacen «una llamada uniforme a las Administraciones públicas» para reclamar ese alivio fiscal. «Los encuestados consideran determinante cambios normativos en esta materia para poder competir con garantías frente a las empresas de otras latitudes», sentencian desde la patronal.