La solución de Asparrena para que los jóvenes se queden a vivir en el municipio
En la antigua casa de la familia Urigoitia, que estaba abandonada desde hace años, levantará siete pisos de alquiler social
La antigua casa de la familia Urigoitia, abandonada y deteriorada por el paso del tiempo, albergará siete viviendas de alquiler social en Araia. Es la ... decisión que ha adotado el Ayuntamiento de Asparrena para que los jóvenes se queden a vivir en el pueblo. Como primer paso, ha adquirido el inmueble, de planta baja, dos pisos y bajo cubierta. «Nuestro objetivo es que las personas jóvenes tengan más posibilidades de emanciparse y puedan residir en el municipio», ha explicado esta mañana la alcaldesa, Txelo Auzmendi.
La compraventa, cerrada el 2 de abril, ha supuesto una inversión de 290.000 euros para el Ayuntamiento, que se plantea ahora «la ilusionante tarea del diseño y elaboración del proyecto para su posterior ejecución».
El edificio albergó la vivienda habitual de varias familias y un bar. Su rehabilitación contribuirá también a mejorar la calidad de vida de los 1.600 habitantes de la localidad y a afianzar la vida social en el centro de Araia, donde hasta no hace mucho «había carnicería, pescadería, mercería, ultramarinos, tres bares, o tienda de electrodomésticos, entre otros», ha recordado Auzmendi.
El edificio pertenecía a la familia Urigoitia. Fue «donde nació y vivió el precursor de la fábrica Ajuria y Urigoitia, hasta la construcción del Palacio que la familia utilizó como vivienda y sede de oficinas de la fundición y que mantiene todavía en nuestro pueblo», ha añadido Auzmendi. El edificio, protegido por el Plan General, forma parte de la plaza con su configuración antigua, aunque otros edificios de la misma zona han ido sufriendo la despoblación y la pérdida de vida social que afecta a muchas localidades.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión