En Zabalgana
La Policía Local despliega todos sus agentes operativos para frenar una pelea multitudinaria en Vitoria15 patrullas, entre ellas varias de la Ertzaintza, acordonan la calle Bremen para separar a las facciones, armadas con palos y enfrentadas por causas que se investigan
La disputa entre dos familias, ambas con residentes en el macrobloque de alquiler social de la calle Bremen, en Vitoria, provocó entre la noche ... del sábado y la madrugada de ayer, domingo, un nutrido e inusual despliegue policial. Debido al alto número de implicados en la reyerta y a los objetos peligrosos esgrimidos –«numerosos palos» y, como mínimo, «una cachaba»–, la Policía Local envió a «todos» sus agentes operativos. Al poco se les unieron siete dotaciones de la Ertzaintza. En total, una quincena de recursos.
Según ha sabido este periódico de medios policiales, vecinos de esta calle de Zabalgana telefonearon alarmados al 092 por los enfrentamientos en los alrededores del edificio propiedad de Alokabide. «Se lanzaron innumerables amenazas de muerte, aparte de insultos, y alguno recibió de lo lindo», desvelan moradores de este inmueble. «Nos asustamos mucho al ver lo que había justo debajo de nuestra casa», abunda otra familia de este inmueble.
La Policía Local fue la primera en aparecer. Se desplegó todo el turno operativo. Hubo un par de patrullas del GPA (una unidad comodín), cinco más de agentes uniformados, incluido el responsable del grupo, y una de efectivos de paisano. A pesar de tan multitudinaria presencia aún fue necesario el apoyo de la Ertzaina, cuerpo que contribuyó a recuperar la calma con otras siete dotaciones más.
Los policías acordonaron un par de áreas. En un extremo reunieron a una facción y en el opuesto, a sus contrarios. También se incautaron de varios «palos» y de «una cachaba». Algunos de los implicados en la gresca multitudinaria tenían heridas visibles. Y uno necesitó de atención sanitaria por la gravedad de los golpes recibidos.
Prometen «venganza»
Sin embargo no se produjeron detenciones, aunque varias personas sí fueron identificadas. Con la calma recuperada, poco a poco la presencia policial se disipó. En parte porque las noches de los sábados «suelen ser las más activas, como así ocurrió (ayer domingo), y no podíamos dejar la ciudad desatendida», atajan agentes participantes en el dispositivo.
La Guardia urbana mantuvo un discreto retén hasta bien entrada la madrugada de ayer ya que se escucharon amenazas de «venganza». Se investigan las causas de esta pelea multitudinaria.
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