El parque eólico de Labraza sale adelante con los votos de todo el pleno de Oion

Antes de ella, en Oion ya se podía ver que la sesión de este miércoles no era una más. Vecinos de Labraza y colectivos en contra de las renovables se concentraron frente al Ayuntamiento para protestar con pancartas y cánticos contra el equipamiento energético como 'Labraza no se vende, Labraza se defiende'.

Dentro, las posturas ya estaban fijadas de antemano. Tanto Bildu como el PP habían anticipado su voto favorable, por lo que la iniciativa contaba con los votos para salir adelante independientemente de lo que hiciesen PNV y PSE.

Sin embargo, los apoyos de los ediles de cada color político tenían motivos bien diferentes. En Bildu, durante los días previos el alcalde José Manuel Villanueva ya había explicado que su formación seguía en contra del proyecto de Iberdrola y el Gobierno vasco, pero debía autorizarlo «por imperativo administrativo» para evitar una posible acusación penal por prevaricación.

El PP, por su parte, clarificó a primera hora del miércoles el apoyo de sus dos ediles entre acusaciones de «contradicción» a EH Bildu. Eduardo Inclán, aseguró que el parque es una infraestructura «de vital importancia para mejorar la situación a futuro de Labraza, Barriobusto y Oion a nivel energético y económico».

Dentro del pleno, la crispación marcó el debate antes de votar, con pitos y más cánticos. El diputado general, Ramiro González, ya había 'halagado' dos días antes el trabajo «colaborativo» de Bildu en Oion con Aixeindar «para facilitar la instalación del parque». En esa línea siguió el portavoz del PNV en el municipio de Rioja Alavesa, José Antonio Tarragona, que antes de apoyar el proyecto, criticó la «doble vara de medir» de la coalición abertzale.

La presidenta de la junta administrativa de Labraza, Begoña Martínez de Olcoz, también cargó contra Bildu. «Cuando estabais en la oposición, sujetabais nuestra pancarta y ahora estáis facilitando la instalación», afeó antes de advertir que «lo que está en juego es nuestra identidad».

Villanueva replicó que su formación ha sido «muy crítica con el proyecto» e incluso presentó alegaciones contra la central, pero están «obligados» a dar luz verde al equipamiento después de obtener todos los permisos administrativos. Por su parte, el socialista Óscar Layana no estuvo presente en la votación. Tras la aprobación, vecinos presentes en el pleno arrojaron pegatinas contra el alcalde y a la salida también se registraron momentos de tensión.

Una vez el Ayuntamiento ha dado luz verde a los trámites urbanísticos, todo queda en manos de Iberdrola y el Gobierno vasco. La cotizada vizcaína debe decidir qué aerogenerador instala en torno a la villa amurallada antes de pedir la licencia de obra. Inicialmente el proyecto se tramitó con unos molinos de 5 megavatios de Gamesa que están teniendo muchos defectos y que son responsables de las millonarias pérdidas –243 millones en el último trimestre de 2024 y sin visos de ser rentable hasta finales de 2026– que ha registrado la firma vascogermana en los últimos años. Sin embargo, ahora la empresa podría cambiar por modelos más pequeños o de otro fabricante que no arrastre los defectos de Gamesa. La decisión se antoja clave para determinar cuándo se pide la licencia de obra para empezar las obras del parque, que llevarán nueve meses desde la puesta de la primera piedra y que supondrán una inversión de casi 50 millones.