Olabide y Amor Sin Barreras abren escuela en Kenia
La ikastola vitoriana y la ONG se unen para dar educación, alimentación y asistencia médica a 34 niños de 2 a 4 años en una de las zonas más pobres de Turkana
s. lópez de pariza
Lunes, 17 de enero 2022, 01:10
Lokitaung está hoy de celebración. Se inaugura en esa población de Turkana (Kenia) una escuela infantil impulsada por la ikastola Olabide y la ONG Amor ... Sin Barreras en colaboración con Aztivate Foundation como organización en el terreno. Se trata de un ambicioso proyecto que combina educación, inteligencia emocional, asistencia médica y programa nutricional. La iniciativa ha suscitado tanto interés que ya se está estudiando por el ministerio de Educación de Kenia como centro de referencia y modelo a replicar en la zona de Turkana Norte.
«Este proyecto es mucho más que una guardería», resume Ana Baz, fundadora y directora de la ONG Amor Sin Barreras. «En Lokitaung ya tienen colegio pero las familias tienen que pagar los libros, los uniformes... y muchas no pueden permitírselo. A nuestra escuela van a venir niños con una situación de vida realmente complicada», agrega esta alavesa. Un total de 34 menores de 2, 3 y 4 años asistirán a partir de ahora a las instalaciones. «Muchos de ellos no tienen padre ni madre, ni acceso a agua corriente ni luz. Y la mayoría come solo tres veces por semana», describe Ana, que ha estado varias veces sobre el terreno y que hasta ahora había trabajado en diferentes proyectos relacionados con la nutrición desarrollados en Kenia. La elección de los alumnos ha sido complicada y se ha realizado siguiendo criterios «de mayor necesidad».
La idea es que en un futuro los escolares keniatas viajen a la capital alavesa para contar su experiencia
En la construcción del centro, que comenzó el pasado mes de julio, han participado hombres y mujeres locales, lo que ha supuesto «un empujón brutal» a la economía de la zona. Y desde Vitoria, los alumnos de la ikastola Olabide también han puesto su granito de arena.
Dos profesoras vitorianas
Ellos han sido los encargados de diseñar la zona de recreo que tendrá la escuela, bautizada como Pole Pole Olabide. La relación no acaba ahí, y es que la idea es que en un futuro los estudiantes alaveses sigan conectados con las familias y los niños de Turkana. «Tenemos mucho que aprender de ellos. Tienen una conexión increíble con su propia esencia y con la naturaleza, y valores como el de los cuidados y protegerse entre ellos», explica Ana Baz.
La idea es que en un futuro incluso los jóvenes keniatas puedan viajar hasta Vitoria para contar su experiencia de primera mano. Por el momento, dos profesoras de Olabide serán las encargadas de poner en marcha allí el proyecto educativo durante los primeros días. «Será un plan educativo totalmente adaptado a la cultura turkana, no queremos occidentalizar ni imponer nada», subraya Ana, que anima a todos los que quieran colaborar en este proyecto a hacerlo a través de la iniciativa 'Los 100 de Turkana'.
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