Una nueva sentencia eterniza otra vez la polémica OPE foral de bomberos

Y es que, en un nuevo fallo al que ha tenido acceso ELCORREO, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) obliga a reiniciar desde cero el juicio sobre el examen psicotécnico y la dichosa 'rebaremación' de estas oposiciones, que provocó un bombardeo de recursos que ha retrasado la resolución de la OPE. No es que haya existido un defecto de forma, sino que el error se cometió antes incluso de la primera vista oral. No se emplazó correctamente a los opositores que pudieran estar interesados en personarse al juicio.

Según remarca el auto del TSJPV, el anuncio del procedimiento salió en el boletín oficial del País Vasco (BOPV) y en el del territorio histórico (Botha), aunque «no consta publicación en los términos de la convocatoria –la página web de la Academia de Arkaute y su tablón de anuncios– ni tampoco consta, desde luego, emplazamiento personal a los interesados». En este sentido, esta resolución contra la que no cabe recurso recuerda que «los aspirantes que aquí postula la nulidad de actuaciones por no haber sido emplazados eran perfectamente identificables y es claro que se veían directamente afectados por el resultado del proceso».

«No es suficiente en este caso el emplazamiento realizado en el BOPV y, por tanto, habiéndose seguido el proceso a espaldas de los interesados que debieron haber sido en su momento emplazados, es por lo que procede acceder a la nulidad interesada reponiendo las actuaciones al momento de emplazamiento de los interesados», subraya el texto suscrito por el magistrado Juan Carlos García López. Así, después de esta decisión, el proceso judicial vuelve a la casilla de salida. Se convocará –esta vez de manera correcta– a todas las partes interesadas, se repetirán las vistas orales, se presentarán las mismas pruebas y habrá que esperar otra vez a que se dicte sentencia. Una vía que, según las fuentes consultadas por este diario, podría alargarse hasta dos años más.

Durante ese periodo, los 46 bomberos que Álava acaba de incorporar a su organismo autónomo permanecerán de forma «cautelar». Tanto quienes aprobaron por méritos propios como los beneficiados por la 'rebaremación', que podrán sumar experiencia y puntos de cara a futuras OPEs. Pero, ¿qué es la dichosa 'rebaremación'? Pues es el 'quid' de toda esta odisea, y donde probablemente se erró, y es que se presentaron 1.170 aspirantes y hubo que bajar por debajo del 'cinco' la nota de aprobado en la prueba psicotécnica, ya que sólo lo superaron 180 candidatos para 114 plazas, lo que iba a reducir en exceso la bolsa a las primeras de cambio. Esto se denomina 'campana de Gauss' y contó con el respaldo de abogados, por lo que el proceso siguió adelante y los candidatos acaban de terminar la formación en Arkaute. Sin embargo, esa 'rebaremación' no se incluía en las bases del proceso de selección y hubo candidatos que llevaron este asunto ante la Justicia.

Algunos magistrados han reconocido que esa 'campana de Gauss' no se ajustó a derechos, pero ha existido un bombardeo de recursos entre quienes se vieron beneficiados y perjudicados por esta medida que aún esperan una resolución y han complicado todo el proceso. La idea original del diputado Iñaki Gurtubai era esperar hasta que se resolviese hasta el último recurso, un planteamiento que echó atrás el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Vitoria.