«Hay que invertir en estos 4 años lo que no se ha hecho en 50; hay que sacar a Álava de la atonía»
El 'jefe' de la patronal apuesta por la estabilidad que PNV y PSE «darán» a los gobiernos municipal y foral. «Pero tienen que ser valientes y osados, ya no valen excusas»
JUAN CARLOS BERDONCES
VITORIA.
Domingo, 2 de junio 2019, 02:00
El escenario que han dejado las elecciones del pasado domingo satisface al mundo empresarial del territorio. Al margen de afinidades políticas y de que «nosotros ... no trabajamos con los partidos sino con las instituciones», apunta el presidente de SEA Empresas Alavesas, siempre han pedido «gobiernos estables y ahora se dibuja esa situación» en el Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación con el posible pacto PNV-PSE. A cinco días para la asamblea general de la patronal, Pascal Gómez repasa para EL CORREO la actualidad económica, habla de proyectos de ciudad y territorio, y de los retos de la organización.
- Van a presentar el plan estratégico 2019-2020. ¿Cuáles son las líneas prioritarias?
- Dar respuesta a las necesidades de las empresas en materia de personas y ser capaces de retener talento es un eje estratégico. También queremos consolidar el papel institucional de SEA y fomentar el desarrollo empresarial con la creación de 2.000 compañías en los próximos cuatro años. Hay que volver a la senda del crecimiento.
«De 6 de la mañana a 10 de la noche estamos tantas personas en Júndiz como en Zabalgana y Salburua»
- El mapa político que ha quedado tras el 26-M, ¿cree que puede ayudar?
- Por supuesto. Estoy convencido de que va a haber un cambio de ciclo en la manera de hacer política en el Ayuntamiento y la Diputación. El 'no dejo hacer y no hago' -de la oposición- o el 'no puedo hacer porque no me dejan' -del gobierno- se tienen que acabar.
- ¿Quiere decir que los futuros gobernantes ya no tendrán excusas?
- No solo eso sino que han de ser valientes y osados. Entramos en una legislatura ilusionante y muy importante. Hay que invertir en estos cuatro años lo que no se ha hecho en los últimos 50. Hay que sacar a Álava de la atonía con proyectos urbanísticos, industriales, de logística, culturales, educativos... Los políticos tienen mucha responsabilidad y los empresarios estaremos ahí para ayudar.
- ¿Les ha ido bien a ustedes con los gobiernos PNV-PSE?
- Nosotros trabajamos con las instituciones y la relación es muy buena y tiene que seguir siéndolo. Siempre hemos pedido gobiernos estables y ahora se dibuja ese escenario.
«Hay que crear 2.000 empresas en los próximos cuatro años. De esa forma acabaríamos con el paro»
- ¿Da por hecho que se repetirá esa alianza de jeltzales y socialistas?
- No participo de las negociaciones pero entiendo que sí.
- Hablaba de proyectos en diferentes ámbitos. Entre en detalles.
- Hay que ampliar el terreno industrial y desarrollar nuestros polígonos. En Júndiz, de seis de la mañana a diez de la noche estamos tantas personas como en Zabalgana y Salburua. Necesitamos resolver los problemas de seguridad, mejorar el transporte público y con el proyecto de autopista ferroviaria seríamos más atractivos para el tráfico de mercancías.
- ¿Cómo es posible que en una ciudad tan industrial como Vitoria no haya una concejalía específica? Ustedes tampoco la reclaman.
- Sería un gesto importante, sí. Pero todo ha de venir acompañado de hechos. Nosotros estamos a disposición de Ayuntamiento y Diputación.
Soterramiento y auditorio
- Los cargos públicos repiten de manera constante que la industria es clave en el territorio o que representa un tercio del Producto Interior Bruto (PIB). ¿Se siente el sector suficientemente apoyado?
- Empieza una legislatura nueva y tenemos que pensar en qué hacer para ayudar al crecimiento y para que haya una armonía entre el territorio y la capital. No puede ser que haya un potencial tremendo en Rioja Alavesa y no exista una mejor conexión con Vitoria. No puede ser tampoco que los de Oion se consideren de Logroño y los de Llodio, de Bilbao. Hay que hacer provincia.
«No puede ser que los de Oion se consideren de Logroño y los de Llodio, de Bilbao. Hay que buscar la armonía en Álava»
- Vitoria también tiene retos por delante. El soterramiento y la llegada del Tren de Alta Velocidad es el de mayor envergadura. ¿Qué puede suponer?
- Un mayor tráfico de pasajeros, como ya lo estamos notando con el H-24 en Foronda. Pero la ciudad tiene que estar preparada para dar respuesta a quienes vengan a Vitoria y evitar que los habitantes de aquí se vayan a otras capitales cercanas. Hoy en día en las ciudades modernas, avanzadas y pujantes te conectas gratis al wifi y esos cambios hay que darlos aquí también. Otro reto debe ser aumentar los grados de ingeniería y fortalecer los módulos de Formación Profesional. Y en materia cultural, una ciudad estratégica como Vitoria ha de ampliar su oferta con conciertos, obras de teatro...
- El auditorio en La Senda, ¿resolvería esas carencias?
- Habría más posibilidades para las artes escénicas, eso seguro. Pero también habría que dinamizar las actividades de calle para animar la ciudad.
- El comercio y la hostelería lo agradecerían. Son dos sectores con problemas. ¿Qué propone?
- Hay negocios que sí están sufriendo pero también creo que necesitan una transformación y evolucionar. El comercio tiene que adaptarse ya a las nuevas tecnologías, hoy un taxista es más 4.0 que muchos establecimientos. Y en hostelería hay que reflexionar si el pintxopote es rentable y conveniente. Muchos empresarios del sector nos dicen que es un modelo agotado y que hay que buscar alternativas de mayor calidad y más atractivas.
Vitoria, una ciudad rica
- Pero a pesar de todo, Vitoria es la undécima ciudad más rica de España y la tercera de Euskadi. Algo bueno tendrá.
- Yo diría que es una ciudad rica porque tiene un buen desarrollo de sus empresas, hay empleo y calidad de vida. No tiene que ver con el consumo o la cultura, por ejemplo. Lo que no se entiende es que en una capital con tantas oportunidades no haya más relevancia del comercio.
«Son sectores que deben evolucionar. Hay que reflexionar si es rentable el negocio del pintxopote»
- Habla de empleo, pero Álava tiene más de 19.000 parados. ¿No le parecen demasiados?
- Sí...
- ... ¿Y qué se puede hacer para reducir este número?
- Crear más empresas. Nos faltan mil con respecto a 2008, antes de la crisis. Ahora hay 9.635 y entonces había 10.557. Con una media de diez trabajadores por compañía, si creamos 2.000 en cuatro años acabaríamos con el paro. Las administraciones y SEA debemos buscar procedimientos para dar facilidades a nuevos empresarios.
- El programa 'EmpleoAraba' que gestionan junto a la Fundación Vital cumple tres años. ¿Cuantos trabajos se han generado?
- Se han cerrado mil contratos. Es un camino a seguir. Nos estamos peleando por retener el talento.
- Dentro de un año toca renovar parte de la junta rectora y elegir presidente. ¿Aspira a repetir en el cargo?
- Queda un año de mandato y tenemos mucho trabajo que hacer. Yo estoy a disposición de los empresarios alaveses.
«Nuestra automoción lleva años trabajando en la transición energética»
Pascal Gómez tiene la máxima confianza en Mercedes y Michelin y en sus respectivos dirigentes sobre la gestión que hacen de la transición energética en un sector clave como la automoción.
- Yo soy muy respetuoso con las decisiones de las empresas y seguro que estas multinacionales llevan años trabajando en la transición energética, pero también en la automatización de procesos y en la transformación tecnológica. Sí es importante que cuando un político haga una declaración, tenga en cuenta que el mundo de la automoción en Euskadi, pero sobre todo en Álava, es estratégico.
- Estamos en una situación privilegiada con respecto a otras provincias vecinas. Aquí hay sindicatos que quieren acordar y otros que no, que solo buscan la confrontación. Pero no hay trabajadores en Álava que no estén bajo el paraguas de un convenio ya firmado o en vías de negociación.
- Se está negociando. El anterior en 2015 ya lo firmamos.
- Antes de la crisis, tres de cada cuatro trabajadores tenían contrato indefinido. Y ahora, después de todo lo que hemos pasado las empresas, se mantiene ese ratio. La temporalidad en el sector privado es menor que en el público, incluso es más baja ahora que antes de la crisis.
- Poner el foco en el cuidado de las personas y trabajar por atraer y retener el talento.
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