Arranca en Álava la vacunación antigripal con escasas terceras dosis de covid

Así al menos lo ha explicado esta mañana la enfermera Laura García, quien reconoce que el primer día de las campañas de este tipo pasan «nervios». Y no es por no tener un público entregado. «Hay mucha receptividad», dice. El Pilar es uno los barrios vitorianos más envejecido y la campaña contra la gripe es una de las más esperadas del año. Si antes de la covid ya se protegían contra la temida influenza el 60% de los alaveses, ahora los responsables sanitarios creen que aumentará. Sobre todo tras la histórica vacunación masiva del pasado año, cuando el temor a padecer al mismo tiempo la gripe y el covid llevó a más alaveses de los grupos de riesgo que nunca hasta el pabellón Iradier Arena y los centros cívicos habilitados para aligerar el proceso.

Este año la campaña regresa a sus orígenes y son las enfermeras de los centros de salud las encargadas de poner la antigripal y ofrecer la tercera dosis de Pfizer o Moderna a los mayores de 70 años, según los casos. En este primer día, de acuerdo con los datos de Osakidetza, van a pasar por consultas de enfermería de toda Euskadi un total de 80.000 personas de los grupos de riesgo. Esto es, mayores de 65, enfermos crónicos, embarazadas y trabajadores de colectivos esenciales para el cuidado de personas vulnerables. Sólo por El Pilar van a pasar a lo largo del día 140 vecinos, lo que supone que en el conjunto de los centros de salud de la OSI Araba lo harán unas 1.600 personas.

«La gente está muy concienciada con la vacunación. El pasado año vimos muy pocos casos de gripe debido al uso generalizado de las mascarillas y puede que este veamos algo más, pero aún es pronto para decir nada», comenta el jefe de la unidad de Atención Primaria del centro de salud Habana-Cuba, Jesús María Iturralde. El mayor miedo entre quienes se quieren poner las dos vacunas a la vez es si van a tener muy doloridos los dos brazos, agregan desde enfermería.

Filo Nieto salió este lunes de la consulta con la tercera dosis de vacuna de la gripe que recibe e toda su vida y su hermana Luisa, con la segunda. Ninguna se la había puesto en años anteriores pese a formar parte de la población diana desde hace un par de lustros. «Me la puse el año pasado y me sentó bien y eso que tengo la tensión alta. Y de la de la covid ni me enteré», confiesa Luisa. En la fila aguardaban también Miguel Bermejo y María Ernestina Echevarría de López y un elegante Ciriaco Díaz que a sus 78 años aseguraba que lleva diez cumpliendo con su cita con la antigripal. «Antes me cogía unos catarros muy fuertes y desde entonces, nada. Siempre soy de los primeros en ponérmela».

La cita previa de la antigripal se abrió el pasado jueves para estos grupos de riesgo y el 15 de noviembre se extenderá al resto de la población, tal y como se hizo en 2020. Osakidetza ha comprado 651.333 dosis, un 14,3% más que el curso anterior. Además, contempla adquirir otro 20% más si se produce una mayor demanda. La principal novedad de esta campaña, que tiene por lema «Y ahora que la gripe no nos separe. Vacúnate», es el tipo de suero, que ha cambiado con respecto a anteriores ediciones para ofrecer una respuesta inmunitaria más robusta. Euskadi ha apostado por el tetravalente para hacer frente a dos linajes de la cepa A y otros dos de la B. La fórmula anterior inmunizaba contra dos subclases del tipo A y uno solo del B.