Piden que no se autorice el parque eólico entre Llodio y Ayala

Ahora, una vez presentado el estudio de impacto ambiental, el grupo ha pedido adhesiones a sus alegaciones que se podrán presentar hasta el 26 de marzo para evitar que se autorice la instalación eólica porque «requeriría del desarrollo de un proceso participativo». Además, necesitaría «un Plan Especial», dado que «no tiene cobertura urbanística alguna y carece de mediciones directas». Tampoco se han hecho trabajos de campo para hacer el Estudio de Impacto Ambiental, que «deberá incorporar resultados del Estudio Previo de Aves y Quirópteros, de Integración Paisajística y del efecto sobre las zonas habitadas próximas» por el efecto de sombreado repetitivo como consecuencia del giro de las aspas. También debería realizarse, en su opinión, análisis del ruido hasta dos kilómetros de distancia de los aerogeneradores, que serían visibles desde los caseríos de Malkuartu hasta los barrios de Larrazabal e Izardio y desde otros núcleos en suelo no urbanizable en Llodio; desde Luyando y Zuaza y la zona de Zerrabe-Zuaza, además de la carretera que conduce a Okondo en Ayala; y ya en Okondo desde los barrios de Goikoetxea, Villachica y otros caseríos.

En opinión del colectivo, el estudio también deberá tener en cuenta que se pretenden instalar otros parques eólicos en el entorno de Ayala y la afección a las actividades económicas ligadas al turismo ecológico que provocarían los aerogeneradores.

Por otro lado, el parque eólico de Larragorri entre Llodio y Orozko cuenta con una petición de la empresa Green Capital para instalar una torre de medición del viento. La Corporación no ha respondido si ha autorizado o no su instalación, pero en febrero pasado, ya pidió al Gobierno vasco la suspensión del proyecto porque «es incompatible con el planeamiento urbanístico municipal y con los instrumentos de ordenación del territorio».