No habrá más maquinistas por ahora en la línea de Ayala a Bilbao
El ministro de Fomento descarta más personal a corto plazo y atribuye en el Senado la suspensión de trenes a «una sola incidencia» puntual
La suspensión de trenes en la línea de cercanías Bilbao-Orduña no tiene visos de resolverse a corto plazo. Ayer, el ministro de Transportes, José ... Luis Ábalos, explicó en el Senado que la situación en la línea se debe a «una falta puntual de maquinistas, pero fue una sola incidencia que no creo que caracterice la situación en general». Mientras tanto, los sindicatos siguen insistiendo en que la suspensión de trenes se prolongará durante los próximos meses por la falta de personal que obliga a cancelar los convoyes que no disponen de conductor. El lunes sin ir más lejos, se suspendieron diez trenes en la línea Bilbao-Orduña.
El ministro, que contestaba a una pregunta del PNV acerca de la reposición de frecuencias ferroviarias en el País Vasco, explicó que «la demanda en Cercanías de Bilbao se ha reducido en un 30% y se ha repuesto el 97% de los trenes». La demanda de los servicios juega un papel fundamental en la reactivación de la oferta, según explicó su responsable, una circunstancia que también afecta a los trenes de medio y largo recorrido como los que atraviesan Álava y dan servicio a la Llanada y Añana. La senadora del PNV, Isabel Vaquero, que presentó la pregunta, replicó que «el servicio es malo».
El comité de empresa de Renfe por su parte, aseguró ayer que tras la reunión mantenida el lunes con los representantes de Renfe, «nos dijeron que la situación se va a mantener hasta mediados de enero o principios de febrero». Las razones de estos plazos hay que buscarlas en la Oferta Pública de Empleo que Renfe convocó en marzo y que quedó suspendida por la epidemia. Las pruebas se realizaron en julio, pero eso ha retrasado la incorporación de los nuevos maquinistas, que además, necesitan un periodo de formación en la línea y en los trenes que van a manejar.
El presidente del comité de empresa, José Ángel de Castro, aseguró que «a los maquinistas se les deben 1.200 días que ya han trabajado para hacer frente a esta situación» y a eso se añade que el parque de trenes de la línea «está obsoleto, tiene más de 30 años y a veces no hay ni piezas».
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