Un arrestado en Vitoria por agredir sexualmente a dos menores en un bar del Casco Viejo

Según ha sabido este periódico de fuentes policiales, tres jóvenes departían en el interior del negocio hostelero cuando el ahora sospechoso les informó del inminente cierre. Con la excusa de que no quedaba más clientela, las invitó a quedarse en el interior una vez bajara la persiana.

Al parecer, una de las tres declinó el ofrecimiento y regresó a su casa. Con las otras dos, siempre según la versión ofrecida por las víctimas en comisaría, emprendió una velada estrategia de acoso.

Primero propuso participar en el juego de la botella (consistente en que el perdedor debe quitarse una prenda, hasta que alguien se queda totalmente desnudo), sugerencia rechazada por las adolescentes. Ninguna de las dos ha alcanzado la mayoría de edad. Al menos una cuenta con sólo 16 años.

A partir de ahí, supuestamente comenzó a invitarlas a chupitos. En este punto el relato de las víctimas se nubla. Ambas perdieron la consciencia. Se desconoce si por el número de consumiciones ingeridas o por si alguna contuviera un estupefaciente. Otro bar de marcha de similar perfil ya figuró en el radar de la Policía Local sospechoso de esta práctica totalmente ilegal. Aquella investigación no prosperó.

El caso es que, refieren los medios consultados, cuando una de ellas recuperó el conocimiento estaba realizando una práctica sexual con el ahora sospechoso, que tiene «más de 40 años». Es decir, casi las triplica en edad.

La otra chica también apuntó a un posible episodio de agresión sexual, pero con explicaciones más vagas. En todo caso, su testimonio también se ha incluido en el atestado policial que será remitido al juzgado de guardia, Instrucción número 2. Esta sala recibirá esta mañana de viernes al hostelero. Tras tomarle declaración y escuchar a las víctimas, la jueza decidirá si le deja en libertad con cargos o si decreta su ingreso preventivo en prisión como ya hiciera dos días atrás con un empleado de una discoteca. A éste le acusan de violar a una chica de 15 años en una lonja cercana a su trabajo una noche de mayo.

Tras recuperar la conciencia, las dos adolescentes pudieron abandonar el establecimiento, de reducidas dimensiones. A continuación llamaron entre sollozos al 112. La gravedad de sus acusaciones activó el protocolo para agresiones sexuales.

Fueron trasladadas a un hospital para que un equipo sanitario las examinara. Una perito forense del juzgado también estuvo con ellas la madrugada de ayer. Ya por la mañana, ambas acudieron a la comisaría de Portal de Foronda para aportar más detalles de lo ocurrido.

De manera paralela, agentes de la Ertzaintza localizaron al sospechoso, le informaron de sus derechos y procedieron a su arresto. Hoy tendrá la oportunidad de dar su versión de los hechos a la autoridad judicial.