Los alaveses afectados por la crisis podrán sacar «hasta 6.000 euros» de sus fondos de pensiones sin penalización fiscal
Todos los partidos, salvo EH Bildu, apoyan unas medidas que también servirán para aumentar de seis a siete años de las cuentas vivienda
Los alaveses afectados por ERTEs, así como aquellos autónomos que hayan tenido que cesar su actividad como consecuencia del estado de alarma, podrán sacar «hasta 6.000 euros» de sus fondos de pensiones y Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) sin ningún tipo de penalización fiscal. Las Juntas Generales de Álava dieron luz verde este miércoles a la propuesta presentada por el Gabinete de Ramiro González, que busca dar un respiro económico a los alaveses en la crisis sanitaria y económica provocada por el coronavirus. Todos los partidos, salvo EH Bildu que optó por la abstención, apoyaron las medidas presentadas por la diputada de Hacienda, Itziar Gonzalo, como un nuevo paquete de medidas que busca «flexibilizar» y «ampliar los plazos» para la obtención de beneficios fiscales que «mejoren» la liquidez familiar y empresarial ante la pandemia del coronavirus.
El nuevo decreto normativo de urgencia fiscal aumentará «de seis a siete años» el plazo de utilización de una cuenta vivienda para que el contribuyente pueda tener acceso a la desgravación por la adquisición de un inmueble que se vaya a convertir en su hogar habitual, así como deducciones por reinversión tras la venta de la vivienda habitual. También habrá una «flexibilización de los fondos europeos» de inversión para la innovación y la financiación económica, además de ampliarse los plazos en el Impuesto sobre Sociedades para la reinversión.
Además, el plazo de presentación y pago de las autoliquidaciones del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentales, así como el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, empezará a contar a partir de junio, tras su suspensión como consecuencia de la declaración del estado de alarma.
Tanto el PP como Podemos respaldaron en el pleno el plan presentado por el Gobierno PNV-PSE, pero con críticas. Aitor Uribesalgo, del grupo popular, expresó que las medidas «no suponen un alivio de la carga fiscal» para los contribuyentes más afectados por la pandemia, sino su aplazamiento en el calendario. José Damián García Moreno, de la coalición morada, valoró que se facilite liquidez a las empresas y a los alaveses a través de aplazamientos de pago y disposición para acceder a las pensiones, entre otras cuestiones.
EH Bildu, por su parte, anunció su abstención porque –según el juntero Iñaki Ullibarri– respaldan el mercado de compra-venta inmobiliaria y no de alquiler. A su juicio, los arrendamientos siguen «sin ningún tipo de control» cuando ese colectivo va a ser el que «más problemas va a tener» ante la coyuntura económica que desencadenará como consecuencia de los efectos económicos de la propagación del virus .