El pleno reprueba por primera vez a una concejala de Vitoria

El Ayuntamiento de Vitoria ha reprobado este miércoles, por primera vez en su historia, a uno de sus representantes. La concejal popular Marian Castellanos, responsable del área de Seguridad Ciudadana, ha recibido en el pleno este simbólico castigo tras una estéril polémica sobre el coste de las nevadas sufridas por la ciudad este invierno. La edil comunicó un gasto inferior al real en una comisión de Medio Ambiente y aunque posteriormente ella misma corrigió el error, el uso "partidista" de los datos, según denunció la totalidad de la oposición, ha llevado a todos los grupos, PNV, PSE y Bildu, a pedir su reprobación. Castellanos, muy afectada, ha visto como su nombre pasa a estrenar la más negativa lista del Consistorio por, según denuncian nacionalistas, socialistas e independentistas, mentir y ocultar documentos.

En la comisión anterior al preceptivo pleno que votó bajo idénticos argumentos el castigo, los grupos fueron muy duros con la concejala. David Pina, de Bildu uno de los impulsores de la reprobación, no ha querido ahondar en la polémica, pero ha recordado que "no nos ha dado ningún motivo para no seguir pidiendo su reprobación"y las declaraciones de "sus compañeros de partido han demostrado que usted (por Castellanos) sabía que el gasto se iba a disparar".

"Ha falseado los datos, todos sabíamos que era superior. ¿Por qué nos mintió? Eso justifica su reprobación, más allá de si los medios eran o no necesarios". Además, Pina ha censurado que una empresa haya cobrado 180.000 euros por cuatro días de trabajo y que "hayamos pagado los camiones y la salmuera a un precio desorbitado por una falta de previsión de este equipo de Gobierno". Por todo ello, Bildu se ha reafirmado en el castigo a Castellanos, que quieren hacer extensivo a todo el gabinete Maroto. "Había una orden expresa de negarme los datos. No es la primera vez que lo hacen. Ustedes gobiernan de cara al autobombo y niegan el trabajo a la oposición. Esta prepotencia merece ser reprobada".

Por su parte, el PSE, que en su día llegó a demandar la dimisión de la concejala, ha recordado que "no estamos ante un debate sobre el coste de las nevadas, si era mucho o poco, el tema es que se ha faltado a la verdad y que se ha ocultado información a los grupos que los solicitaron por varios cauces y eso es una vulneración de derechos básicos". Marian Gutiérrez ha insistido en lo ya apuntado por Pina y remarcado que el Ejecutivo "intenta evitar la labor fiscalizadora de la oposición". La edil socialista ha mostrado su sorpresa ante el hecho de que "al comparar los gastos de 2012 con los de 2010 -cuando gobernaba el PSE- también mintió y presentó facturas incompletas. Esas sí las encontró con celeridad", ha puntualizado.

En defensa de su compañera de gabinete, la teniente de alcalde Idoia Garmendia ha comentado que "comparezco para guardar el buen nombre de la señora Castellanos. En su comparecencia pidió cuatro veces disculpas y aún así no cesan. Esta reprobación es una exceso". La concejala de Medio Ambiente ha acusado a la oposición de acusar con falsedades a Castellanos, "a quien ya habían condenado antes de escuchar sus disculpas y explicaciones". Según el Gobierno, "todo lo ocurrido no es más que un error. Todos somos personas. Su intención es usar una gestión bien hecha, seguida de un error, para atacar al Gabinete Maroto. Esto no va con la concejala de Servicios a la Ciudadanía, es una maniobra de desgaste del equipo de Gobierno".

Finalmente, el PNV, en boca de Álvaro Iturritxa, se ha ratificado en lo expuesto con anterioridad. "No merece la pena volver sobre lo mismo. Es muy incómodo tener que señalar directamente a una persona por su gestión. Ojala este fuera un debate técnico sobre la actuación contra la nieve, pero no lo es. Objetivamente los flujos de información no han sido correctos y así lo atestigua que no se sepa de qué se piden disculpas por parte de la señora Castellanos. El acceso a la información se ha negado repetidamente y eso es grave".

"Error humano", argumentó Castellanos

A finales de abril, PSE pidió la dimisión y Bildu la reprobación de la concejala al considerar que mintió cuando informó del gasto del Consistorio en la gestión de las nevadas de este pasado invierno. Castellanos pidió después disculpas por lo que consideró un "error humano". Dijo que el gasto en la gestión de las nevadas fue de 320.000 euros, cuando se demostró posteriormente un desembolso de 580.000 euros. El PNV, socio presupuestario de los populares, comunicó después que aquella comparecencia que apoyaría la reprobación planteada por Bildu. La oposición no creyó entonces a Castellanos y tampoco lo ha hecho este miércoles.