Culminar el ramal guipuzcoano ha requerido 2.000 millones de inversión
El trazado quedará finalizado en febrero, y la remodelación de la estación de Atotxa a finales de 2025, con un sobrecoste del 6%
Las obras del ramal guipuzcoano del TAV, el que ha ejecutado el Gobierno vasco adelantando un dinero que posteriormente descuenta del Cupo que entrega al ... Estado, han entrado definitivamente en su recta final. El último informe trimestral sobre la evolución de los trabajos, publicado por Euskal Trenbide Sarea el 31 de diciembre, ratifica que el trazado entre San Sebastián y Bergara quedará culminado a finales de febrero tras quince años de labores. Solo faltará por culminar la reforma de la estación de Atotxa, en San Sebastián. Se espera que quede rematada a finales de 2025.
Llegados a este punto se pueden empezar a echar cuentas desde el punto de vista económico. Según el balance presupuestario, la obra civil del trazado -plataforma, viaductos, túneles...- ha requerido hasta la fecha una inversión de 1.994,8 millones. Supone un sobrecoste del 6,7% respecto a lo que se calculaba inicialmente, cuando los trabajos fueron adjudicados.
Los 133 millones 'extras' se han destinado principalmente a ampliaciones de los presupuestos pactados con las diferentes constructoras. En 15 años ha habido dos crisis económicas y el auge de precios provocado por la pandemia y la invasión rusa de Ucrania. Las revisiones de precios se han llevado 83,7 millones, y las reclamaciones patrimoniales por afecciones a terrenos de titularidad privada, otros 27,7.
De los 133 millones de desvío, las revisiones de precios se han llevado 84 y las reclamaciones patrimoniales casi 28
A estas cuantías abonadas por el Gobierno vasco habrá que añadir más adelante la instalación de la superestructura. Se trata de todos los elementos que convertirán el trazado de hormigón en una línea ferroviaria de alta velocidad: vías, catenaria, balizas de control, dispositivos de seguridad... aún no se sabe si esta parte de la obra la asumirá directamente el Ejecutivo central, ya que lo normal es que se saque a concurso público todo a la vez cuando también esté finalizado el otro ramal del TAV, el que une Bizkaia y Álava.
El trazado que enlazará Bilbao y Vitoria lo ejecuta directamente el Gobierno de Madrid a través de Adif, su presupuesto ronda los 3.000 millones -no hay datos públicos- y avanza a menor ritmo. A 31 de diciembre seguían en obras 5 de los 16 tramos del proyecto. El más retrasado es el del 'nudo' de Bergara, tanto por su tamaño como por su complejidad.
Rescindido y readjudicado
En Bergara quedarán unidos el ramal guipuzcoano y el de Bizkaia y Álava. Su estado es el que impide pensar en que el TAV eche a andar antes de 2027 -sin tener listo el acceso y la estación de Bilbao-. A finales de la década pasada el contrato para la ejecución del 'nudo' tuvo que ser rescindido y readjudicado porque las constructoras se negaban a iniciar los trabajos si no se incrementaba el presupuesto.
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