Chivite asegura que EH Bildu ha apostado por «ser útil» y UPN, por la «barricada»
La presidenta de Navarra defiende en Madrid la transferencia de Tráfico: «No es una cesión al nacionalismo»
La presidenta de Navarra, María Chivite, ha puesto en valor la disposición de «ser útil» de EH Bildu al favorecer la aprobación de los Presupuestos ... frente a la «barricada» en la que, en su opinión, se ha instalado UPN. La jefa del Ejecutivo foral ha explicado que el Gobierno tripartito, integrado por socialistas, Geroa Bai y Podemos, mantuvo una reunión con Navarra Suma para que sus responsables presentaran su propuesta sobre las Cuentas, un documento que nunca llegó a sus manos. Por contra, ha incidido, los representantes de la coalición soberanista, cuya abstención ha sido determinante tanto en la investidura como en el 'sí' al proyecto presupuestario, les entregó una proposición con sus principales peticiones, lo que demuestra su «voluntad» de diálogo.
La jefa del Ejecutivo foral ha hecho estas declaraciones en Madrid, en un desayuno informativo organizado por Europa Press en el que ha sido presentada por el secretario de Coordinación Territorial del PSOE, Santos Cerdán. Ha sido su 'puesta de largo' política en la capital desde que accedió a la presidencia en un acto en el que también estuvo acompañada por varios miembros de su Gabinete, secretarios de Estado, el presidente del Parlamento de Pamplona, Unai Hualde, Uxue Barkos, el secretario general de CC OO, Unai Sordo, y diputados y senadores socialistas, de EH Bildu, Geroa Bai y Podemos.
María Chivite ha defendido la transferencia de Tráfico a Navarra como un derecho de la Constitución y negó que se trate de una «cesión» o de un «trato de favor» al nacionalismo, como ha denunciado Navarra Suma. Y es que uno de los artífices de la predisposición del Ejecutivo a ceder esa competencia ha sido el PNV, integrado en Geroa Bai. La presidenta ha negado que la Guardia Civil se vaya a ir de la comunidad foral, si bien ha reconocido que se dedicará a otras funciones. «Animo a quienes manipulan la verdad que se comprometan con ello», ha subrayado.
La mesa de diálogo entre el Ejecutivo de Pedro Sánchez y la Generalitat ha sido otro de los asuntos centrales en la intervención de Chivite. En este sentido, ha pedido no tener «miedo» a que se hable en Cataluña y se ha mostrado confiada en que el Gobierno llegará hasta donde la Constitución le permita. La dirigente socialistas se ha preguntado cuál es la alternativa a la configuración de ese foro. «¿La aplicación del 155? No nos ha llevado a situaciones mejores, vivir de espaldas a la problemática catalana como ha hecho Mariano Rajoy no nos ha servido para superar el conflicto, sino todo lo contrario«, ha añadido.
La reacción de UPN no se ha hecho esperar. Su presidente y portavoz parlamentario de Navarra Suma, Javier Esparza, ha replicado que Chivite «se siente cómoda y apoyada por el nacionalismo vasco y por el independentismo, pero las barricadas todos sabemos quién las montaba y quién las quemaba, y todo sabemos quiénes son hoy sus socios prioritarios«. Tras lamentar que la presidenta haya »perdido la oportunidad« de »poner en valor lo relevante que es Navarra«, el dirigente regionalista también le ha reprochado que haya hablado como secretaria general del PSN, »insultando a los que estamos en la oposición«.
«No sé cómo puede hablar de pluralidad y de diálogo cuando de forma permanente se excluye al 40%» de la ciudadanía, la que «legítima y democráticamente votó a Navarra Suma», ha añadido Esparza, y se ha preguntado de qué «centralidad» habla Chivite «cuando los acuerdos (del PSN) se producen con la extrema izquierda y con el independentismo más radical». A su juicio, la jefa del Ejecutivo foral «ha hecho suyo el relato y el lenguaje que la izquierda abertzale tiene cuando habla de las víctimas del terrorismo», algo que, ha subrayado, «me produce escalofríos», al tiempo que le ha reprochado que «mintiendo» se refiera a la postura de UPN en materia de competencias, ya que su partido aboga por asumir las de «Tráfico en exclusiva, eso defendíamos y eso estamos defendiendo», pero dejando claro que «el PNV no es nadie para negociar, definir, ni marcar los tiempos».
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