"No me interesa el premio"
Messi, desconsolado por la derrota, quita valor al Balón de Oro tras las críticas recibidas a su designación como mejor jugador del torneo
Borja malaina
Martes, 15 de julio 2014, 00:13
El Balón de Oro del Mundial se ha convertido en a principal polémica de los últimos campeonatos. Romario fue el último ganador del torneo en lograrlo. Desde entonces, las elecciones de Ronaldo, Kahn, Zidane y Forlán han suscitado innumerables comentarios sobre este galardón. En 2014, la historia se repite. Antes de la final, había dudas sobre quién recibiría el trofeo. Los ganadores Müller y Kroos y los destacados Robben y James Rodríguez aspiraban a este premio. Messi tenía la oportunidad de ganar el Mundial, su principal objetivo, y el Balón de Oro pondría la guinda.
Sin embargo, el domingo el argentino estuvo muy desacertado, perdió la opción de emular a Maradona 28 años después y se mostró desconsolado por el resultado. A pesar de ello, la FIFA lo eligió Balón de Oro. «En estos momentos no me interesa el premio. No me importa nada. Nosotros queríamos levantar la Copa» respondió Leo a la pregunta sobre el valor de ser elegido mejor jugador. Las críticas de aficionados y exfutbolistas no se hizo esperar. Maradona fue implacable: «A Leo le regalaría el cielo, pero cuando los 'marketineros' quieren hacerle ganar algo que no ganó, es injusto». Estas declaraciones apuntan a la marca deportiva de Messi, includia en el nombre del premio.
El Balón de Plata, Thomas Müller, también quitó importancia a no haber recibido el premio. «No me importa esa 'mierda'. Somos campeones del mundo», bromeó el delantero alemán con un periodista. El entrenador de Olympiacos, Míchel González, comentó que al astro argentino le había dado vergüenza recoger el premio y el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, reconoció sentirse sorprendido por la elección. Solo el seleccionador argentino, Alejandro Sabella, defendió a su pupilo: «Lionel está desde hace rato en el Olimpo de los grandes».
El coordinador de las categorías inferiores de la Federación Española, Ginés Meléndez, y el exentrenador del Betis, Gabriel Calderón, forman parte del Grupo de Estudios Técnicos de la FIFA, encargado de otorgar el premio. Los 14 miembros de este consejo decidieron durante la final que Messi merecía el galardón por haber logrado llevar a Argentina a la final.
El delantero del Barcelona rompió su mala racha en los Mundiales y fue el mejor del combinado albiceleste en la fase de grupos, con cuatro goles. A partir de octavos, perdió el olfato goleador y no fue tan decisivo como se esperaba. La asistencia a Di María ante Suiza fue su última acción clave. Desaparecido ante Bélgica y Holanda, la final parecía el escenario ideal para mostrar su mejor versión y devolver la confianza de todo un país.
Lo intentó, especialmente en la primera parte, donde mostró una explosividad que parecía perdida pero, a pesar del Balón de Oro, este no fue su torneo. El tiro cruzado que se marchó por escasos centímetros al inicio del segundo tiempo así lo demuestra. Tras él, continuó el partido andando, en espera de otra oportunidad que no llegó. Su sueño de conquistar el Mundial se desvaneció y la designación como mejor jugador del torneo no fue consuelo para un ganador como él.