Acusan de extorsión al jefe de la Policía Local de Miranda: «Te he tratado como a un hijo y me pagas con este desplante»

J. J. L. A. ha demandado al mando porque asegura que le garantizaba cierta impunidad a delictiva a cambio de encargarle 'favores' como que quemara el coche de otros agentes o incluso que atropellara a un familiar de uno de ellos. En su escrito, pide una orden de alejamiento porque tiene miedo a posibles represalias y asegura que el mismo jueves, cuando el rumor de que el tema había transcendido a los medios ya circulaba por la ciudad, el jefe de Policía Local intentó ponerse en contacto con él en reiteradas ocasiones.

Según la transcripción de los mensajes que consta en la denuncia, el mando intentaba presionarle para que quedaran personalmente y esclarecer los hechos. «Ven y hablaremos como hombres que somos», le espeta en uno de los textos después de que J. J. L. A. pusiera diferentes excusas para evitar encontrarse. «Parece que algo me ocultas», «no quieres hablar y te escudas diciendo que estás fuera» o «ya sé lo que ocultas», son otros de los whatsapp enviados en un intervalo de menos de una hora por un número que supuestamente corresponde al mando, aunque es algo que deberá determinar la investigación.

En un momento de la conversación, el denunciante se dirige por el nombre al jefe de Policía Local y le pide que no le moleste más. La respuesta es: «ahora te molesto, me sorprendes». En otro punto de la conversación, el número que se atribuye al policía asegura que «si tu me has considerado como un padre y yo te he tratado y te he dado consejos como si fueras mi hijo, no entiendo que no quieras venir».

La denuncia por este supuesto acoso ha sido formulada en las dependencias de Policía Nacional, a diferencia de la anterior demanda, que fue directamente al Juzgado de Instrucción de Miranda con el respaldo del despacho jurídico Herrero-Alegre, encargado de llevar la causa.

A la espera de la decisión que adopte Fiscalía sobre la demanda por extorsión, el proceso judicial se va enmarañando y sumando nuevas denuncias. A la segunda presentada por la misma apersona contra el jefe de Policía, en este caso por supuesto acoso al llamarle y escribirle al móvil, hay que añadir las formuladas por los otros agentes implicados y sus familiares.

Algunos de los policías a los que presuntamente quería dañar el jefe, al conocer los hechos, también han buscado asesoramiento legal. La mujer de uno de los agentes ya ha tramitado su denuncia tras saber que se habían difundido imágenes suyas y de sus hijos menores. Lo mismo sucede con el varón a cuyo padre se sospecha que ordenó atropellar el mando, encargo que nunca llegó a ejecutarse, igual que la quema de vehículos particulares.