Encuentran el kayak con el que supuestamente Daniel Sancho arrojó a su víctima
El hijo del actor Rodolfo Sancho, que ha confesado a la Policía tailandesa haber matado a un amigo de origen colombiano, llegó a ofrecer 1.000 dólares por comprar la embarcación
Leire Merino
Domingo, 6 de agosto 2023, 14:56
Conitnúan saliendo a la luz nuevos detalles del asesinato del cirujano colombiano de 44 años, Edwin Arrieta, confesado por el hijo del conocido actor Rodolfo Sancho, Daniel Sancho, de 29. El sábado, la Policía tailandesa encontró un kayak en la playa de Salat, a unos 300 metros del hotel donde se cometió el crimen en la paradisiaca isla de Ko Pha Ngan. Se cree que podría tratarse de la embarcación que utilizó el autor confeso de los hechos para deshacerse de la maleta con los restos de su amigo, a quien descuartizó en más de una decena de pedazos.
Según informa The Bangkok Post, diario local que cita a fuentes policiales, dos mujeres llamadas Tuk y Kanda fueron identificadas como las propietarias del kayak y pasaron a disposición policial para ser interrogadas.
Según su versión, el español llegó a su tienda sobre las nueve de la noche con la intención de alquilar un kayak. Ante el peligro que podía suponer usarla de noche para el turista, rechazaron su petición.
El hombre, frustrado por la negativa de las tailandesas, llegó a ofrecer 1.000 dólares por comprar y llevarse la embarcación. Ante tanta insitencia, las mujeres finalmente aceptaron.
Antes de desmembrar a su amigo, el acusado declaró entonces a los agentes de la Policía tailandesa que en una ocasión llevó a Arrieta a su habitación y éste habría intentado mantener relaciones sexuales con él, a lo cual Sancho se habría negado respondiendo de forma violenta. Fruto de la ira, según esa versión, le empujó y la víctima cayó al suelo. Después lo llevó a la bañera, donde ésta se dio un golpe en la cabeza y quedó inconsciente.
Sin quedar claro si a causa de tal impacto finalmente falleció, el joven español terminó admitiendo el crimen, según fuentes policiales. Así, a los agentes les habría confesado después que habría procedido a cortar su cuerpo en más de una docena de trozos y guardarlos en varias bolsas de basura de color negro. Algunas aparecieron el vertedero referido de la isla, donde los servicios de limpieza descubrieron que dentro había partes de un cuerpo humano, entre ellas una pelvis e intestinos recortados. El hijo del actor, chef de profesión, fue grabado comprando artículos sospechosos días antes, por lo que la Policía cree que puede tratarse de un crimen premeditado.