Rock con más figura que genio
La banda californiana puso su sonido hard, con peso e intención, ante un público que todavía llegaba el festival y al que gustó sin seducir
Una potente banda llegada desde Los Ángeles tuvieron el honor de dar los primeros compases del Azkena del vigésimo aniversario. Lo del hard rock sin complicaciones parece una baza segura para animar un festival, sobre todo cuando es tan deseado como el de este año.
Los responsables de piezas como'Rolling 7s', 'When I'm gone' 'The Wire' o 'Another Last Time' pusieron su música ante un público que llegaba como un goteo pero que no llegó a llenar es espacio ante el escenario God, el principal.
La conexión con el personal era inmediata, pero no profunda. Todavía estaba la parroquia en tránsito, con saludos y encuentros, con recargas de las pulseras 'cashless' y con avituallamiento para hidratarse con espuma.
El volumen lograba impactar el pecho de los oyentes y movía a la danza y el coreo ritual. Pero en general el bolo quedó un tanto deslavazado. Es lo que tienen las horas tempranas.
¿Y ellos? Pues sin duda tienen imagen de banda rockera y lo apoyan con unas apuestas guitarreras muy clásicas y con peso. Pero el 'frontman' del cuarteto viajaba entre los ecos a Guns 'n' Roses vía Axl y la deuda al gran Robert Plant. Tampoco hay que olvidar que el 80% de las bandas evidencia que les debe algo a los Zeppelin. El resto, sencillamente no lo hace de manera tan clara.
Lo que no cuajó fue una versión del 'Let's Go Crazy' de Prince con el tempo bajado y un riff a lo 'Tutu' de Marcus Miller.
