CaixaBank se suma a la fiesta de los beneficios: 3.145 millones, un 33% más
El Estado recibirá este año 274 millones de euros en dividendos de la entidad, en la que es el segundo accionista
CaixaBank, la entidad con mayor actividad bancaria en España, no se ha quedado atrás a la hora de aflorar los beneficios cosechados el pasado año ... y que están marcados por el resurgimiento del negocio financiero. Una mezcla de aumento de tipos de interés, control de la morosidad y crecimiento de la economía ha permitido que la banca alcance cifras de récord. El banco presidido por Jose Ignacio Goirigolzarri obtuvo el pasado año un beneficio neto de 3.145 millones de euros, lo que supone un 33% más que en 2021 en términos homogéneos ya que en ese ejercicio se contabilizaron también las plusvalías extraordinarias procedentes de la fusión con Bankia. El beneficio total, incluidos los extraordinarios de la fusión, desciende un 40%.
Los datos aportados este viernes por CaixaBank reflejan también que la actividad tradicional de la banca -tomar dinero del mercado y prestarlo- vuelve a ser un buen negocio, tras una larga travesía del desierto que comenzó en 2008 con los primeros síntomas de la crisis inmobiliaria. El margen de intereses -la diferencia entre lo que cobra la entidad por los créditos concedidos y lo que paga por obtener recursos ajenos- creció el pasado año un 15,7%, hasta situarse en 6.916 millones de euros. El cobro de comisiones, la segunda fuente de recursos convencional aportó 4.009 millones, con una mejoría del 8,2%.
En términos comparativos, el avance de CaixaBank en la generación de beneficios se sitúa a medio camino de lo reportado por las otras dos grandes entidades que han publicado ya sus cifras correspondientes a 2022, ya que el beneficio de BBVA aumentó un 38% mientras que Santander ha aflorado un avance más modesto del 18%.
El banco va a repartir un total de 1.700 millones de euros en dividendos, lo que supone que el Estado recibirá en torno a 280 millones con cargo a los beneficios de la entidad del pasado año. Esa remuneración supone un aumento importante ya que el último dividendo cobrado fue de 190 millones, con cargo a los beneficios de 2021. El Estado es, detrás de la Fundación Caixa, el segundo accionista de referencia del banco con un 16,11% de las acciones. Esa participación tiene su origen en el rescate de Bankia, ejecutado por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012, operación en la que la entidad heredera de Caja Madrid recibió una inyección de 22.400 millones de euros para evitar su quiebra. Los accionistas de CaixaBank, además, se han beneficiado del programa de recompra de acciones en el que el banco ha invertido 1.800 millones de euros.
Pese a que CaixaBank ha experimentado una notable recuperación bursátil en el último año y las acciones de los bancos cotizan al alza en una coyuntura en la que se espera un notable aumento de sus beneficios, el valor de la participación estatal está aun muy lejos de igualarse con el capital destinado a su rescate. En la actualidad, ese paquete accionarial ronda los 5.000 millones de euros.
El presidente del banco, Jose Ignacio Goirigolzarri, ha mostrado su satisfacción por el desempeño de la entidad a lo largo del pasado año porque supone, ha indicado, «concluir con éxito el proceso de integración de la mayor fusión del sector financiero de nuestro país».
También se ha referido a los importantes cambios que se han producido en apenas doce meses. Un «viaje en el túnel del tiempo que nos permite recordar el tipo de preocupaciones que teníamos hace un año y que eran muy distintas a las actuales. Entonces estábamos preocupados por la fusión, la integración de los servicios informáticos y la salida de personas del banco», ha dicho. Y es que en el último año la entidad ha reducido en 5.137 personas el número de empleados, al tiempo que ha cerrado 913 oficinas. Goirigolzarri, sin embargo, ha asegurado que no se cerrará «una oficina cuando seamos el único banco de una localidad». Algo que sucede en 470 municipios de España.
Ha destacado el importante empuje que ha experimentado el mercado hipotecario, en especial en el segundo semestre del año, ya que ha permitido a CaixaBank duplicar en 2022 el importe de créditos para adquisición en vivienda, en comparación con el ejercicio anterior
Sube y baja en hipotecarios
El banco espera una evolución de sube y baja para el comportamiento del euríbor, la principal referencia que se utiliza para fijar el coste de los créditos hipotecarios. Así, CaixaBank cree que este índice se va a mantener a lo largo del año en niveles muy similares o ligeramente superiores a los que ya tiene. Del 3,4% actual, pasaría a un 3,5% como media anual. Pero de cara a 2024 el banco espera una relajación que circularía de forma paralela a la normalización de la inflación y a una menor restricción monetaria por parte del Banco Central Europeo. Con ello, han indicado, el euríbor medio de 2024 se situaría en torno al 3%.
El mercado bursátil, con toda lógica, ha tenido hoy un comportamiento errático. Si bien en el arranque de la jornada ha premiado los resultados de la entidad financiera con una revalorización por encima del 2,5% más tarde ha corregido esa tendencia. Así, tras la presentación de los resultados las acciones de CaixaBank han comenzado a caer, para perder más del 4% en comparación con el cierre del jueves.
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