CAF e Irizar lideran la electrificación del transporte público europeo

Y en ese empuje por teñir de verde la movilidad y dejar atrás fuentes más contaminantes, tanto el pasado año como lo que llevamos de curso están siendo periodos especialmente fructíferos para las dos compañías guipuzcoanas, que están experimentando un crecimiento notable en los pedidos que proceden de las distintas regiones comunitarias al calor de los fondos europeos que llegan a los distintos consistorios del continente.

En el caso de CAF Solaris (que produce principalmente en Polonia), la cifra de autobuses suministrados creció un 5% en 2024 hasta llegar a los 1.525. Un 83% de estos fueron de cero o bajas emisiones. La compañía está llenando su cartera de pedidos mediante contratos de gran envergadura firmados recientemente. Uno de ellos para suministrar 170 buses eléctricos para Suecia, y el último de ellos, el anunciado el 30 de junio para proveer    de 270 buses eléctricos articulados a Alemania, por un valor superior a los 220 millones.

Por su parte, el Grupo Irizar se adelantó a sus competidores y en 2011 tomó la decisión de crear el área de negocio dedicada a la electromovilidad para comenzar a construir autobuses 100% eléctricos con destino a Europa. En 2016, el grupo creó Irizar e-mobility, una empresa encargada de ofrecer soluciones de electromovilidad para ciudades, incluyendo vehículos, sistemas de carga, tracción y almacenamiento de energía. Desde entonces los pedidos también han crecido de manera muy notable.

La firma afincada en el municipio guipuzcoano de Aduna superó en 2024 la cifra de 1.200 eléctricos producidos. Según se detalla en su página web, a lo largo del último año anunciaron el suministro de hasta 200 autocares eléctricos para ciudades europeas. Distribuirán 28 de esas unidades a Murcia y hasta un centenar a De Ljin, la sociedad pública de transporte de la Región Flamenca de Bélgica. El último contrato anunciado por la firma (este mismo miércoles) contempla el envío de 14 nuevos vehículos para el aeropuerto de Gatwick, en Londres. Con todo, a pesar de que durante el último año haya ganado presencia en mercados como el italiano, francés o alemán, España sigue siendo su principal escaparate, donde tiene presencia en más de 26 ciudades.

Sea como fuere, el contexto juega a favor de las dos compañías. La línea de la UE es muy clara, que pretende que para 2035 el 100% de los autobuses adquiridos por los ayuntamientos sean cero emisiones. En 2024, esta cuota alcanzó el 49%, y por primera vez en la historia, el número de eléctricos adquiridos superó a los diésel.

Un análisis de mercado realizado por 'Mordor Intelligence' estima que el mercado de la electromovilidad urbana seguirá creciendo a pasos agigantados hasta alcanzar un volumen de 3.060 millones de euros en 2029, frente a los 1.672 de 2024.

Además del mercado europeo, las dos empresas vascas han puesto el foco en la expansión a otros continentes. De hecho, CAF Solaris logró a finales del año pasado la entrada en el mercado norteamericano, con un contrato para suministrar cuatro autobuses eléctricos a Washington, y en marzo consiguió otro acuerdo histórico para distribuir 107 'trolleybuses' a Vancouver (Canadá), por un valor de 120 millones. De hecho, CAF Solaris tiene la expansión a otros continentes como uno de los objetivos marcados de su Plan Estratégico 2022-2026.

Mientras tanto, Irizar logró su primer acuerdo extraeuropeo en 2023. Concretamente, el estado de Yucatán, en México, les encargó 32 autobuses 100% eléctricos. El modelo escogido fue el 'ie tram', el autobús más    emblemático de la compañía, y cuyo aspecto recuerda al de un tranvía y que se puede ver con frecuencia en, por ejemplo, unidades de Bilbobus.