«Pasará tiempo hasta que esté a tope»
Jokin Altuna solo piensa en eliminar los dolores y fortalecer sus manos para disfrutar de un verano que recupera la normalidad
juan pablo martín
Viernes, 17 de junio 2022, 02:48
A lo largo de la semana ha entrado otra vez en la cancha para hacer manos. Llevaba casi un mes sin tocar pelota. El lunes estuvo poco tiempo, pero a lo largo de los días ha aumentado el entrenamiento de forma progresiva. Sus extremidades están blandas, pero Jokin Altuna no tiene prisa. Esta vez no hay ninguna cita urgente que le obligue a acelerar su proceso de recuperación. «La salud es lo primero. Cuando te operas no miras tanto el regreso, sino ponerte bien. Ahora tengo trabajo en hacerlo, más que en pensar en un partido en concreto».
El pasado día 26, el doctor Víctor Galán le extirpó un nódulo que tenía en un dedo de la mano derecha. Llevaba tiempo con él. Desde el Parejas de 2021. Pero como no suponía un problema porque no le molestaba a la hora de golpear, decidió esperar. El apretado calendario en el que estaba inmerso tampoco le dejaba muchos huecos. Sin embargo, últimamente el dedo se le ponía un poco blanco cuando acababa los encuentros, «y se me dormía». Por eso, cuando quedó apeado de la final del Manomanista, visitó al especialista y decidieron que era el momento. «Estaba claro que había que abrir y quitarlo».
Todo discurrió según lo previsto. A los ocho días de la intervención le retiraron los puntos. La cicatriz ha cerrado correctamente y Altuna está haciendo todo lo que le aconsejan para que se encuentre en perfectas condiciones. «Quiero salir sin ningún miedo ni molestia. Jugar tranquilo, disfrutar. No tener quebraderos de cabeza».
Pero para ello necesita tiempo. Ahora lo tiene. Su empresa, Aspe, se lo ha dado. En un principio le programó para mañana en Urrestilla, pero al ver que no llegaba decidió retrasar la eliminatoria que debe disputar en el Cuatro y Medio navarro contra Peio Etxeberria al día 29 en Mungia. Esa es la fecha en la que se volverá a vestir de blanco.
Volverá fresco
En su cabeza todavía está lejos. Altuna tiene otros objetivos en mente a más corto plazo. Su dedo debe sanar definitivamente para olvidarse del dedal que le protege actualmente al entrar en la cancha para que el golpeo no le afecte. La intervención en la diestra y un problema en uno de los tendones de la zurda, que también necesitó horas de masaje y reposo, han provocado que ambas manos pierdan consistencia. Necesita endurecerlas y recuperar sensaciones. «Pasará tiempo hasta que esté a tope».
Sin embargo, llegará fresco mentalmente. Hacía bastantes temporadas que no disfrutaba de tantos días para desconectar y los ha aprovechado. Pudo irse de vacaciones y romper con la rutina. Luego volvió a retomar la preparación física, pero no pensar en los partidos también tiene sus beneficios.
El número uno de la plantilla de Aspe sabe que le espera un verano intenso y está cogiendo fuerzas. Después de dos años, la pelota recupera la normalidad y eso incluye un número importante de festivales. «Hemos pasado un bache por el tema del covid, pero es muy buena noticia que los ayuntamientos se vuelvan a animar a organizar festivales. Y lo más importante es que los aficionados disfruten». Altuna III pondrá de su parte.